La ciudad de Valencia han acogido este fin de semana pasado el campeonato de Europa de Vela Paralímpica. Los mejores regatistas del viejo continente se han dado cita en la Capital del Turia para medir sus fuerza y luchar por el cetro europeo. Además, esta competición ha sido la antesala del Campeonato del Mundo que tendrá lugar el próximo mes de noviembre en Melbourne (Australia) en el que los participantes lucharán también por una plaza en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro.
En la competición han participado regatistas de diversas nacionalidades y en diferentes pruebas. Valencia es el lugar perfecto para albergar una competición de estas magnitudes y muchos de los competidores encuentran en estas aguas del mar Mediterráneo, el sitio idóneo para entrenar y prepararse para los nuevos retos que se presentan ante sí. Este es el caso del campeón de Europa Rolf Schrama.
El holandés, que se ha proclamado, junto a su compañera Sandra Nap, campeón de Europa en clase SKUD18, mantiene con Valencia una vinculación especial. El campeón está encantado de venir a la ciudad y cada vez que lo hace, no oculta el orgullo de sentirse un valencianista más. El holandés, hincha del club de Mestalla confeso, luce por las zonas colindantes al puerto, sus prendas con el escudo del Valencia CF estampado. Esta pasión que él siente no es algo circunstancial. Se trata de un sentimiento que viene de largo, exactamente desde que Guus Hiddink estaba al frente del banquillo ché al inicio de la década de los 90. El carisma del entrenador holandés provocó que muchos de sus compatriotas se interesasen por el conjunto de Mestalla. El buen juego del Valencia CF de Hiddink no pasó desapercibido en Europa, a pesar de goleadas en contra como la de Kalsruher en Copa de la UEFA, y gestos como ser el pionero en obligar a retirar símbolos nazis de un estadio de fútbol, provocaron que muchos adeptos se uniesen a la causa tal y como ocurrió con Rolf Schrama.
El SKUD18 es una embarcación tripulada por dos personas. Con una eslora de 5,9 metros y una manga de 2,29.Tanto el patrón como el tripulante son deportistas con discapacidad y se requiere que al menos uno de ellos sea mujer. El patrón debe ser siempre un deportista con gran discapacidad, con un perfil 1 ó 2 según la reglamentación de la IFDS (Federación Internacional de Vela Paralímpica). El proel, en cambio, puede tener cualquier nivel de discapacidad entre 1 y 7, aunque se tiende a un perfil 6 ó 7, con menos afectación y más movilidad. El patrón sólo lleva el timón, mientras que el proel se encarga de las maniobras y del funcionamiento de las tres velas. Dependiendo del tipo de discapacidad de los tripulantes, el barco puede adaptarse más o menos. Unas adaptaciones se realizan mediante servos electrónicos; así, con unos joysticks, los regatistas pueden subir las velas, abrirlas o cerrarlas, manejar la dirección o incluso bascular el asiento de babor a estribor para hacer contrapeso y que el regatista pueda mantener el equilibrio y permanecer erguido. El Skud 18 se estrenó como modalidad paralímpica en Pekín 2008.