Un partido con mucho en juego para ambos contendientes, teniendo en cuenta que sólo restan tres jornadas para que termine la fase regular de la División de Honor. Los de Todd Dammers, que no deberían tener problemas para seguir un año más en la máxima categoría, tratarán de hacer valer de nuevo el factor campo y que los puntos se quedan en Fadura.
Sobre el papel, el partido se presenta muy atractivo, con dos rivales a los que les gusta manejar la pelota en su tres cuartos y buscar velocidad en los movimientos para sorprender a su oponente. En este sentido, y aunque AMPO Ordizia parece tener algunas bajas importantes, será clave mantener la tensión defensiva para frenar a los goierritarras, especialistas en buscar el intervalo y entrar con fuerza desde atrás, además de ser superiores en delantera a los getxotarras.
Ofensivamente, la consigna es clara: asegurar las posesiones y tratar de que las visitas a la veintidós rival no sean en vano. Uno de los aspectos a mejorar serán los saques laterales, donde se vienen perdiendo demasiadas opciones a lo largo de toda la campaña. Respecto al posible quince, Todd Dammers presentará el habitual con algunas pequeñas variaciones motivadas por la ausencia de los jugadores más jóvenes, de gira por Inglaterra hasta el fin de semana.
Como todo buen derbi que se precie, la emoción y la tensión sobre el terreno de juego está asegurada, más aún con la importancia de los puntos en juego. De hecho, los últimos encuentros entre vizcaínos y guipuzcoanos se han saldado con resultados siempre muy justos, algunos incluso resolviéndose prácticamente sobre la bocina, como ocurrió en la primera vuelta, cuando Kroll decidió para los de Axio Araña con un golpe en el tiempo de descuento.
La regularidad no ha sido precisamente el fuerte del Getxo Artea esta temporada, y los gualdinegros quieren regalar a su afición un tramo final de liga que palie en cierta medida los sinsabores de este año.