No están siendo fáciles los primeros días de Alex Txikon en su intento de asalto invernal al Nanga Parbat. El lemoarra descansa ya en el Campo Base, a 4.100 metros de altura, una semana después de llegar a Pakistán recuperándose de una severa descomposición que le afecta prácticamente desde su llegada al país asiático.
Acompañado de sus dos compañeros de expedición, Ali ‘Sadpara’ y Muhammad Kan, completó una exigente fase ade aproximación hasta el que será el campamento base para los próximos dos meses. Estas primeras jornadas han servido para poner todo a punto en este CB a unas temperaturas gélidas, que por la noche alcanzn los 15 bajo cero, y planificar el trabajo. El equipo espera ahora una mejora del tiempo, y también del estado de salud de Txikon para poder, en un primer paso, abrir huella hasta el campo I y después establecer allí un depósito de cuerdas y demás material. Se decantarán definitivamente por la ruta Kirshoffer que, aunque “muy helada y seguro dura de pelar” parece menos expuesta a aludes que la Messner.
Txikon ha recibido la visita de Danielle Nardi que le ha proporcionado al de Lemoa algunos medicamentos indicados para el estómago y le ha transmitido su voluntad de intentarlo una vez más por la Mummery Ridge a pesar de que, tras la marcha del polaco Tomek y la francesa Elisabeth Revol, se encuentra sólo para escalar. Afirma que lleva tres inviernos intentándolo aquí y dice que las condiciones que se ha encontrado este año pintan bastante mejor que en anteriores ocasiones. Precisamente Nardi, que cuenta con conexión a Internet, ha anunciado que para mañana se esperan cielos descubiertos que podrían aguantar hasta el sábado.