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El Portu derroca al Somo, co-rey del empate

Kuitxi

Parece que fue ayer cuando, tras la crónica del Somo-Portu de la primera vuelta, 8 de octubre de 2017, saldado con una victoria por la mínima (0-1) de los visitantes, Asís Martín, redactor jefe de este diario ElDesmarque que ustedes manejan a su antojo, tuvo a bien titular "Una tarde con el Portu en el Malecón", un acierto en toda regla, una invitación al goce de la aventura, ya que, más allá de la victoria, el empate y la derrota, el fútbol, deporte de alto riesgo emocional, debe ser tomado como un juego que te invita al placer, a olvidar el dolor, a besar y a querer...

Tras su apoteósica exhibición frente a la 'Cultu' en La Florida (4-1), el equipo jarrillero, en aquella época, llegaba a Muskiz con la baja en el banquillo de Aitor Calle, entrenador cesado por derribo, un técnico interino, el segundo de abordo, German Beltrán, y la revolucionaria propuesta sistemática y humana que, a pesar de haber sido sofocada con el cese fulminante de un 'rebelde' entrenador, siguió en vigor desde el inicio del choque hasta su final. 1-4-4-2.
  Sin delanteros específicos los gualdinegros, Gabri Ortega y Josué Dorrio fueron los que se movieron en tres cuartos intentando causar en la zaga de la Juventud Deportiva el mismo estropicio que sufrió la Cultural de Durango.  Minimizó el daño el Somo, pero terminó cayendo merced a un testarazo brutal del central Mikel Mendez cuando la contienda agonizaba y los festejantes ansiaban el chorro de agua de la ducha como agua de Mayo. Pero era Otoño. Las hojas habían empezado a caer de las ramas de los árboles del monte Mello, en Septiembre, 'When the leaves come falling down', música, siempre necesaria para el milagro de la sanacion.
  Música que uno pincha... pero de la que todos se benefician para salir enchufados al verde y poder, así, dar su mejor versión ante su gente, que la hay, aunque se oficie de visitante, más  este caso en el que los dos equipos en liza están unidos por ese hito piramidal que se dio en llamar Pico Serantes.  Por la tierra de la montaña, por el mar Cantábrico, por el aire de un ala delta que, echada a volar, tanto le da para dejarse caer al humedal del Barbadun como al Cerro Kanpanzar que se eleva majestuoso sobre el templo de La Florida, que lucía verde y seco en la 'mati' del domingo, sin lluvia, un cierto frescor, y esa eterna humedad que, de manera literal, se cala hasta los huesos de las piernas que caminan y esas otras que reposan en el camposanto de Pando.
  Otrora extramuros y hoy pareja de baile de 'Pando Aisia', polideportivo descomunal en el que uno se ha echado unos largos en su pileta para estirar las piernas antes de hacer lo propio con sus dedos, amén de aguzar los ojos para no perderse ni uno solo de los lances de este partido en el que el balón ya ha empezado a rodar, lo tocó Cortezon, el Portu se había reservado esa baza, importante, que para él supone atacar la portería de la carretera, "la de los goles" por la afición local llamada,  en la segunda mitad de los encuentros.  Antes, subiendo él, bajando yo, Alfonso Casas, uno de los hermanos de mi compañero Tomas (Goian Bego!) que defendió las camisetas que hoy, ahora, en este momento, ayer para ustedes, ya están luciendo, cruzamos, cariñosas, nuestras miradas. Así como el jueves tuve el placer de departir en el 'Amalur' de Alfonso del Barrio con Alberto Biota, leyenda de Muskiz que se expandió por toda la geografía vasca. Ausentes. Presentes...
  El 'Somo' acude a hurgar en la herida de un Portu que viene de ser remontado por la 'Cultu' en un visto y no visto. Antes, tablas frente al River en un 'medio día del Club'. Precedidas por una derrota en 'La Baluga'. Un punto de nueve. El Portu de Docando estaba obligado a reaccionar. Solo valía ganar en esta liga loca. Los resultados del sábado arrojaban seis victorias de los 10 primeros de la tabla. Siete, si sumamos el triunfo del Portu. Un logro muy trabajado.   Y de un valor así que el oro. Hasta los 44 se alza el cuadro de oro y hulla, parecen pocos, pero le sirven para ser tercero, a uno del Beasain, que se liberó del Getxo con muchos apuros, a cuatro de la 'Cultu' (entidad con un Director Deportivo faltón, maleducado, grosero, testigo directo de ello fue Miguel Villalba, directivo del Club Portugalete presente en Tabira), líder que, crecido tras su última gesta, volvió a repetir hazaña ante el 'Lagun',  3-4 en el 89', luego de que los de Azpeitia le igualaran un 0-3 de vértigo.
  La Real C es cuarta, tras desalojar de la zona noble el Sodupe al Sestao, tropiezo tan inesperado como inoportuno, del que se aprovecha el Zamudio que, a la chita callando, se coloca sexto con los mismos guarismos que el River, 41, Alaves B que no arranca pero ya es séptimo con 40, los mismos  que 'Lagun' y Sodupe, y uno más que el Balmaseda de Jon Moreno, que ha cerrado la jornada con una victoria en Basarte que compromete a un Amurrio en horas bajas.  Tomando en cuenta que la Real, por su filia con el aita de Anoeta es un ente virtual, los de Jon Moreno, a dos del River, quinto, tienen derecho a soñar que, a tan solo dos puntos del play off real, La Baluga será ese fortín en el que batir a sus visitantes a fin de colocarse entre los cuatro primeros.  Por tanto como esto. Por tanto como aquello perdido frente al Balma, Sestao y, sobretodo, Cultu, el Portu recibía al Somo como si en el envite le fuera la vida.
  "Una tarde con el Portu en el Malecón" que Docando disfrutó desde la tribuna. Una mañana con el Somo en La Florida. Oscura, fresca y humeda. Oscura como un fútbol que no brilló. La frescura y la humedad estuvieron más en la grada que sobre el verde.   Lucha sin cuartel. Un Somo recio, sobrio, serio. Demasiado serio. Le faltó una pizca de alegría a su propuesta. O acaso fue el Portu el que, sacrificando sus buenas maneras, esa vistosidad que se espera y nunca llega, atenazó a los patrocinados por 'Petronor' hasta atarles de pies y manos, manejó hasta tres cuartos, allí moría todo, entre escarceos por la banda y dos disparos lejanos que Mediavilla, felinas estiradas hasta la base del poste, abortó para tranquilidad de los suyos.
Un Portu más virtuoso que, sin embargo, tuvo que recurrir al poderío por tierra y aire de Cuberia, al manejo infatigable de Txaber Ajuria, a la zurda en largo de Moya que, en el 40', conectó con la testa de Bonilla, pared de cabeza con Bengoetxea, un lateral zurdo ejerciendo de centrocampista capaz de ganar la línea de fondo para, pase de la muerte, servir en bandeja al 'nueve' más puro del Portu, a la remanguille pero entró, cuando uno remacha a bocajarro hay que ser portero y medio para evitar este primer gol que acaba de registrar el luminoso.
  Lo más difícil estaba hecho. Al Somo le esperaba ante sus ojos una montaña muy alta para darle la vuelta al partido. Lo intentó. Pero no pudo. No fue el Portu más vistoso, ni mucho menos. A estas alturas del curso, con 'Txopi' missing, Ukerdi Corres, Dorrio y el flamante refuerzo que volvió a Portu desde las Pitiusas, Ander Arbeloa, guardando banquillo, con Cuberia en la sala de máquinas, la parroquia de La Florida debería entender que la propuesta de Carlos Docando no es finura y floritura, primavera de bosque policromático, taller de orfebrería renacentista, sino, más bien, acéptenme el ejemplo, una tabla sobre un mar violento, o, si ustedes quieren, trabajo a destajo en la zafra, bala feroz al centro del combate.  Diversos y muy diferentes entre sí son los caminos que conducen al éxito, y el bueno de Carlos Docando, con la temporada en su sazón de madurez, está convencido de que si el Portu será algo, algo muy grande, deberá esmerarse puliendo un estilo de tintes más propios de mineros que de escultores como Miguel Ángel y su arrebatadora 'Piedad'. "¡Sin perdon!"... piensa Docando. "Inmisericorde como la Cultu que nos remontó. Al enemigo, ni agua. Solo para mis obreros, para calmar su sed"...
  El pasado jueves, junto a Fertxu, corone el Alen de Sopuerta. Pico y antiguo poblado. Minas de hierro a cielo abierto: Juliana, Federica... Así será La Florida. Mineros de pico y pala quiere Docando. Así en casa como a domicilio. Uno ya cree por donde van los barrenos del técnico de Getxo: ¡All Iron... All Iron... All Iron!... Hasta gritar ¡Aliron, Aliron, el Portu es campeón! Atentos a las campanas de la ermita de Alen, la de Santa Lucía. Cuando tañan por última vez. Una, dos, tres y cuatro. Desde el campeón... hasta el último clasificado de los puestos de play off. Si me dan a escoger, por mi condición de jarrillero, Portu... y Sestao River.   El resto, que se busque la vida. No soy de los que ponen la otra mejilla cuando al Portu se le escupe a la cara. La 'Cultu' le debe una permanencia y un play off al Club Portugalete. En La Florida aún sigue presente 'Gure Estiloa'. Futbol munduan bi era dagoz garaipena lortu ahal izateko: zakarra... eta dotorea. Dotore, Portu... BETI DOTORE!
Post- Scripum:  Con el partido vencido, a punto de consumirse el último minuto de los tres de prolongación al parecer del colegiado, Iván Haro, Ander Arbeloa, comandando casi en solitario un contraataque por el flanco izquierdo, habría de rematar al Somo con el segundo tanto del mediodía  a pesar de cometer, para mi gusto, dos errores en la consumación de su último gesto.  El primero: no recurrir al banderín de córner para 'matar' junto a él el tiempo que le quedaba al encuentro.  El segundo: ya que se decantó por el centro al segundo palo, no dotar a su golpeo de rosca con el empeine interior para que la pelota dibujara  una trayectoria de fuera hacia dentro. Su 'error', su 'desacierto' a la hora del pase, derivó en un golpeo recto y diagonal... que se coló por la escuadra del 'palo largo'. ¡Nunca un desacierto se convirtió en un gol tan hermoso!
Por Luis María Pérez, Kuitxi. Periodista y exfutbolista del Portugalete

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