El tenista francés Jules Okala y la griega Despina Papamichail se han proclamado campeones del XXIX Torneo Internacional de Tenis de Getxo, que se ha celebrado en el Real Club Jolaseta.
Okala ha pasado como un huracán por las pistas de tierra batida del club Jolaseta. A su paso ha ido apartando a los rivales que se han cruzado en el camino sin darles opciones a sumar un solo set.
Es difícil contrarrestar su impetuoso juego, ofensivo y de máximo riesgo, porque en cada golpe busca las líneas que delimitan la cancha. Si la pelota bota dentro de los límites, es difícil reaccionar a tiempo para devolverla, porque su portentosa capacidad física le hace aún más temible.
Carlos Boluda-Purkiss, primer cabeza de serie y finalista de la pasada edición, parecía uno de los pocos capacitados para frenar al tenista de Ermont. La experiencia del jugador alicantino, curtido en mil batallas a sus 26 años, se presentaba como el antídoto idóneo para frenar a Okala, pero no ha tenido su día.
Esa opción pasaba por ponerse por delante en el marcador en el noveno juego, en el que el Boluda ha estado a un tanto de lograr el 4-5. La ha dejado escapar y la frustración le ha sacado totalmente del partido. El segundo set ha sido anecdótico. Se ha quedado en una exhibición de Okala, que ha sido justo vencedor por 6-4 y 6-1.
La final femenina no ha respondido a las expectativas. Despina Papamichail y Sandra Samir habían sufrido mucho para llegar al último escalón que les separaba del “Aixerrota”. La egipcia había protagonizado los partidos más largos y trabajados del torneo. Papamichail venía de una semifinal agónica ante su compañera de club Irene Burillo.
Ninguna de las dos había llegado antes a una final en esta categoría y las dos han pagado el exceso de tensión. Los nervios les han impedido alcanzar el nivel de juego mostrado a lo largo del torneo. La mejor gestión de esa ansiedad ha inclinado la balanza del lado de la griega, que se ha impuesto por 6-2 y 6-4.
A sus 26 años la jugadora ateniense ha demostrado haber madurado en su juego con respecto a lo que mostró heces tres años, cuando también pasó por las pistas de Jolaseta en el Torneo de Getxo de 2016. La interpretación del juego y la concentración son sus mejores virtudes.