Una reválida para acabar el año con nota
El CV Sestao cierra el año antes del parón de tres semanas en la Superliga 2 recibiendo el sábado en La Benedicta (19.30 horas) al Voley Playa Madrid, tercer clasificado. El equipo verdinegro arrancará la segunda vuelta del campeonato con otro exigente examen que, no obstante, encara con optimismo después de recuperar las buenas sensaciones la pasada jornada en su duelo con el poderoso Sayre Décimas.
El juego de las sestaoarras ha evolucionado desde que cayeran con claridad en el estreno liguero ante el conjunto madrileño allá en el mes de octubre y el vestuario está convencido de poder plantar cara a un rival que viene de encajar una sorprendente derrota en la pista del Leganés que le ha alejado del grupo de cabeza.
“Si jugamos como en el último partido contra el Sayre estoy convencida de que podemos, por lo menos, puntuar. En la primera vuelta era nuestro primer partido fuera y estábamos amoldándonos a la nueva colocadora. Ahora todo funciona mejor y el equipo está muy compacto. Ellas vendrá a por todas porque después de perder el último partido no querrán descolgarse en una liga que está muy rara”, destaca la entrenador del CV Sestao, Paki Blanco, quien hace un balance positivo del rendimiento obtenido por el equipo en la primera vuelta, que han finalizado en novena posición, con 13 puntos y a cuatro de la zona de descenso.
“Era nuestra idea al principio. Era importante sumar una serie de victorias para estar dentro del grupo y tener confianza y que no nos pasara como el año pasado, que a estas alturas estábamos en descenso. Estoy contenta”, confiesa la entrenadora.
El principal hándicap para las sestaoarras será la baja de Nerea Ruiz. La capitana, una de las jugadoras básicas sobre todo en los sistemas defensivos del equipo, se ha visto obligada a parar por una lesión muscular y no reaparecerá hasta después del parón. “Es una baza muy importante en la recepción, pero en este equipo nadie es imprescindible. El resto del equipo tendrá que arrimar el hombro y ponerse las pilas. Este tipo de contratiempos suelen provocar que las demás estén más atentas y asuman más responsabilidad”, apunta Blanco.