Este pasado lunes comenzaron las votaciones a la Presidencia de World Rugby, esto es, la Federación Mundial de Rugby, las cuales concluyeron el día de ayer, enfrentándose dos maneras de entender cómo organizar el futuro del rugby mundial: una de marcado carácter continuista y la otra rompedora con el actual establishment establecido desde hace ya demasiados años. La decisión se dará a conocer el 12 de mayo en la reunión del Comité Ejecutivo de World Rugby y veremos hacía donde se dirigirá el rugby mundial durante los próximos cuatro años.
Por un lado, tenemos al actual Presidente, Bill Beaumont, inglés, considerado como uno de los mejores segunda líneas de la historia; capitán del XV de la Rosa, con 34 caps, logrando el Grand Slam de 1980; formó parte de los British and Irish Lions en la gira de Nueza Zelanda de 1977; miembro del Salón de la Fama de World Rugby desde 2014; Presidente de la Rugby Fútbol Unión (Federación Inglesa de Rugby), de 2012 a 2016; y desde mayo de 2016 Presidente de World Rugby.
Y por otro, el aspirante, vicepresidente de World Rugby desde mayo de 2016, Agustín Pichot, argentino, medio melé de los Pumas; con cuatro Copas del mundo a sus espaldas; capitán en el Mundial de Francia 2007, donde Argentina alcanzó el tercer puesto; Premio Konex de Platino en 2000 y 2010 como mejor rugbier de la década en Argentina; y miembro del Salón de la Fama de World Rugby desde 2011.
En estos cuatro años en los que los dos contendientes han compartido las riendas del rugby mundial se han ido poniendo de manifiesto las enormes diferencias existentes entre ellos al respecto de sus respectivos proyectos para llevar a cabo en el futuro para el desarrollo del rugby, sobre todo en lo que se refiere al papel de las Federaciones emergentes (Tier-2).
Beaumont, representa el hombre de rugby de la vieja escuela, de la era del rugby aficionado, y está respaldado por los poderes establecidos, mientras que Pichot, quien desarrolló su carrera después de que el rugby abrazara el profesionalismo, es un revolucionario en potencia cuyos mayores apoyos provienen de Sudamérica y los países del Championship.
Por lo que se comenta en los mentideros, y en algún caso por las propias declaraciones de los representantes de las Federaciones con derecho a voto,
parece claro que Beaumont tiene el apoyo de la Región Europea, obteniendo la mayoría, si no la totalidad, de los votos de las Federaciones (Uniones) que conforman el VI Naciones y los de Europa (como Región), mientras que Pichot tendría el apoyo de las Uniones de SANZAAR (Nueva Zelanda, Australia, Sudáfrica y Argentina), y así mismo de Uruguay, Sudamérica y Asia que ya manifestaron el sentido de su voto en favor del argentino.
Las dudas principales pasan por Estados Unidos, y la región de Norteamérica, pudiendo ser sus tres votos al parecer decisivos para decantar la votación en favor de uno u otro candidato.
También existen incertidumbres al respecto de los votos de países como Georgia y Samoa, que parece que están más cercanos a los postulados de Pichot; Rumania y Fiji, quienes en principio podrían estar del lado de Beaumont; y el voto de Japón, también en el aire, a quien Pichot durante su campaña electoral le ha hecho varios guiños poniéndolo como ejemplo de lo que los países emergentes pueden hacer para mejorar su nivel y ofreciéndole un gran protagonismo para el futuro si sale elegido.
En total son 51 votos:
- Los países del Seis Naciones (Inglaterra, Francia, Italia, Gales, Irlanda y Escocia) y los cuatro del Rugby Championship (Argentina, Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia) cuentan con 3 votos cada uno, lo que representa un total de 30 votos.
- Las seis uniones continentales (Europa, Oceanía, África, Asia, Norteamérica y Sudamérica) cuentan con 2 votos cada una de ellas, al igual que Japón, esto es, 14 votos.
- Y los países de Tier 2 (Georgia, Rumania, Fiji, Samoa, Canadá, Estados Unidos y Uruguay) tienen un voto cada uno de ellos, lo que suponen 7 votos.
- En caso de empate, el voto decisivo lo ostenta presidente, en este caso el del propio candidato Beaumont.
Si hacemos caso a los rumores y a las posiciones ya manifestadas por algunos países o regiones, Beaumont tendría asegurados 22 votos mientras que Pichot contaría con 19, quedando así por definir 10 votos, los correspondientes a las Uniones de Oceanía, África y Norteamérica, y los de Japón, Canadá y Estados Unidos.
La suerte está echada. Que gane el mejor, y si se me permite la licencia, confío en que ése sea Agustín Pichot a quien considero la mejor opción para el desarrollo del rugby y la renovación de las obsoletas estructuras de World Rugby.