La saga de películas de Divergente, basada en las novelas de Verónica Roth, ha tomado una decisión que cuanto menos, ha sorprendido a los fans. Después de anunciar que Allegiant -Leal, en su traducción en castellano- se dividiría en dos partes, los responsables de la adaptación de los libros han vuelto a poner sobre la mesa el debate que se lleva gestando mucho tiempo ¿es necesario dividir la historia final de una saga en dos partes?
¿Por qué surge esta pregunta? Pues muy simple: la saga Divergente tirará de imaginación para completar una tetralogía que en las novelas jamás fue pensada para tener una cuarta parte. Anteriormente conocidas como La Saga Divergente: Allegiant Parte 1 y La Saga Divergente: Allegiant Parte 2, las dos últimas entregas de la franquicia pasan a ser La Saga Divergente: Allegiant y La Saga Divergente: Ascendant, siendo éste último título un nombre surgido exclusivamente para su adaptación al cine.
Según diversos medios estadounidenses, la decisión de crear un nuevo título viene promovida por la necesidad de crear una narrativa más extensa en la película, y por ende, expandir un poco más y mejor el universo de la misma. Con dos entregas anteriores, el mundo de Tris -Shailenne Woodley- y Cuatro -Theo James- ya lo conocemos, por lo que se puede suponer que Ascendant servirá para poder realizar el final de la historia sin atropellos.
Solo se puede esperar que esta decisión no suponga que alguna de estas dos partes sufra de un exceso de lentitud en el desarrollo de la trama, como ya ha pasado en otras sagas que han decidido llevar a cabo la misma elección, es decir, dividir en dos películas el capítulo final de la historia. ¿Es Ascendant un recurso para poder llegar a una cuarta parte o realmente es necesaria para poder contar la historia tal y como el director quiere? El tiempo lo dirá.
La Saga Divergente: Allegiant está prevista para marzo del año que viene, Ascendant verá la luz un año después por las mismas fechas.