A apenas un mes y medio de su estreno, y con la continuada polémica del intérprete con más acusaciones surgiendo en los últimos días, el equipo de All The Money in the World (Ridley Scott, 2017) ha decidido reemplazar a Kevin Spacey en la cinta, con el oscarizado Christopher Plummer tomando el relevo, y trabajando a gran velocidad para rodar de nuevo las escenas de Spacey, que trabajó de ocho a diez días en la cinta dando vida a J. Paul Getty.
Si en su momento se decidió simplemente que el foco de la cinta ante su inminente estreno iba a desviarse del trabajo de Spacey, que originalmente iba a tener una fuerte campaña de nominación al Oscar como Mejor actor de reparto, los testimonios contra su deleznable y delictivo comportamiento han crecido hasta el punto de que se haya tomado esta drástica decisión, sabiendo de antemano que el foco de la cinta nunca hubiera estado del todo en la apasionante historia que cuenta.
Scott y los protagonistas Mark Wahlberg y Michelle Williams han coordinado las agendas para este rodaje de urgencia, y Plummer comenzará su trabajo en breve. La velocidad del director es célebre en Hollywood, así que no sorprende tanto que alguien como él planteara esta solución, que revela la tolerancia cero que se vive en este momento con situaciones así. Los actos tienen consecuencias, y Kevin Spacey las está sufriendo.