Con la notable excepción de China, donde llegará el 5 de enero, Star Wars: Los últimos Jedi (Rian Johnson, 2017) se ha estrenado ya casi en todo el mundo, y ha recaudo 450 millones de dólares (de los que 220 son cifras estadounidenses), una cantidad que de hecho supera las previsiones de los expertos en unos 30 millones y que la coloca como la quinta cinta en la lista de mayor recaudación en el primer fin de semana de estreno. Tras Estados Unidos, los países que más han invertido en ver la nueva entrega de la saga son Reino Unido (36.7 millones), Alemania (23.6 millones), Francia (18.1 millones), Australia (15.9 millones) y Japón (14.4 millones).
La cinta continúa la historia de esta nueva trilogía, centrándose en el regreso de Luke Skywalker y el entrenamiento de la joven Rey en el arte Jedi, así como la extensión del Lado Oscuro del parricida Kylo Ren y la última misión de la general Leia Organa, tras el fallecimiento hace casi un año de la actriz Carrie Fisher. Las críticas cosechadas hasta el momento por Star Wars: Los últimos Jedi son muy positivas, a pesar de jugar en contra con la mayor duración de octalogía, con 150 minutos de duración.
No se puede decir que sorprenda especialmente cuando el fenómeno Star Wars es el que es, pero son unas cifras que impresionan, aunque por el momento no puedan compararse con las de Star Wars: El despertar de la fuerza (J.J. Abrams, 2015), aunque tenga todo el sentido del mundo que así sea el caso, ya que Los últimos Jedi no contaba con la misma capacidad de expectación.
pues a mi me parecio un mojon.Un remake,nada nuevo,solo bichitos y a veces hasta aburrida.Se pasan toda la cinta huyendo y parece que solo les interesaba jugar al despite en los trailers.