La búsqueda de respuestas tras el final de Deadpool y Lobezno pasa por la pregunta más repetida tras el final en busca de las escenas postcréditos. La película de Marvel sigue fiel al estilo habitual de la franquicia con un plus de contenido, aunque rompe los moldes de lo establecido. Y lo explicamos sin spoilers y más adelante, con ellos para una explicación completa.
Las primeras reacciones a Deadpool y Lobezno pasan por sus dos escenas postcréditos, pero son diferentes y una puede llevar a confusión. La primera escena puede llevar a confusión, porque está incorporada durante los créditos y no al final de los mismos. Y lo hace de una manera poco habitual, sin un fundido a negro ni una pausa.
La primera escena poscréditos es un homenaje no aparece como lo ha hecho en los últimos años en las películas de Marvel. No hay una pausa o una viso, simplemente es una declaración de intenciones. Porque las escenas aparecen de manera conjunta a los créditos finales de la película. Por eso muchos espectadores durante el cine creen que no es como tal un extra de la película.
De hecho en nuestra experiencia personal, muchos espectadores sabían que había dos escenas postcréditos...pero esta pasó desapercibida. Y lo hace porque no exige una atención total al no estar relacionada directamente con la trama de la película. La segunda escena aguanta, ahora sí, al final de los créditos y establece el vínculo humorístico habitual de la franquicia.
Llegan los spoilers. La primera escena postcréditos, o durante los mismos, es una declaración de amor y nostalgia. Deadpool y Lobezno es la primera película donde Marvel utiliza abiertamente a los X-Men después de algún retazo previo. Y por eso, después de tantas películas de los mutantes de la mano de Fox, hay una conexión con todas ellas.
Porque Marvel no ha roto completamente con lo establecido al tirar de Hugh Jackman para su Lobezno. Por eso esta escena repleta de recuerdos del rodaje de películas anteriores es el nexo para comunicar lo vivido durante décadas con lo que está por llegar. Y al mismo tiempo es una definición de que ese mundo está ahora unido por Deadpool y Lobezno. Y de ahí que cada escena de Jackman y Reynolds tras las cámaras sea tan especial.
De hecho es imposible saber si el Lobezno de Hugh Jackman tendrá más apariciones, pero el aprovechamiento del Multiverso ayuda a ello. Y con el personaje vivo es lógico imaginar su estancia en futuras tramas aunque la totalidad de los mutantes conocidos pasen por un recast completo. Algo que ya ha sucedido por ejemplo con Los 4 Fantásticos.
La segunda escena poscréditos es el gancho cómico habitual para aliviar la despedida, en este caso con Chris Evans. El otrora Capitán América y Antorcha Humana aparece como parte de otro cast de Los 4 Fantásticos con una lengua excesiva y malsonante. Y ese momentazo ocultado durante la peli antes de la matanza de Cassandra Nova, tiene una continuación en el final.
Lo que no tiene Deadpool y Lobezno es una escena poscréditos que alimente el hype por el futuro de la saga. No aparece el típico villano que estropeará los planes para una próxima aventura o la típica jugarreta de Deadpool para ir atrás en el tiempo. Pero la película no lo necesita. Es autoconsciente de que es una aventura cerrada, pero las pinceladas sobre los próximos años está en otro sitio.
Tanto Lobezno como X-23 están vivos y en el mismo universo que Deadpool, y eso los coloca en una posición ideal para aparecer en más películas. Y si esta cinta funciona como parece en taquilla, hay muchas posibilidades de que esa realidad tenga alternativas en la próxima década del Universo Cinematográfico de Marvel.