Tras la inesperada y aun lamentada marcha de Jerome, posiblemente uno de los mejores villanos de la televisión, Gotham regresaba una vez mas con el Juego de Tronos que la caracteriza desde entonces. La eterna lucha entre el mal... y el mal. Galavan vs. Pingüino, y solo puede quedar uno. Y toca estar atentos porque las piezas del ajedrez de Gotham se mueven despacio, pero sin detenerse en ningún momento.
Después de bastante tiempo humillado, Pingüino parece tener la ventaja en esta lucha de poder, y su caballero andante no es otro que Butch, quien fue brutalmente mutilado por su señor para infiltrarse en las filas de su rival, Galavan, probablemente distraído con su campaña electoral para llegar a ser alcalde de Gotham.
Mientras tanto, y sin apenas tiempo de llorar a un compañero caído, Gordon vuelve a mostrar su lado mas oscuro, aquel que todos conocemos, un hombre de principios, sí, pero cuyo fin siempre justifica los medios. Sin embargo no habrá tiempo para reprimendas de su nuevo capitán, Selina y Bridgit son el nuevo foco de atención, atrapar a la "Luciérnaga" es la prioridad número uno. La chica inocente y sufridora de una familia criminal ha estallado en llamas, y de sus cenizas ha resurgido el nuevo terror de Gotham, quien a su paso deja cadáveres incinerados.
Que Gotham se prepare. Por que a la intensa batalla que se cierne entre los ejercitos de Pingüino y Galavan, hemos de sumarle la ira de Selina y la de Edward Nigma (quien había pasado desapercibido los últimos capítulos oculto tras su relación romántica), quien tras perder a sus seres queridos, nadie sabe de lo que serán capaces.