Homeland presenta su 6ª temporada detrás-de-las-cámaras
Showtime difundía hace unos días un vistazo tras las cámaras a la sexta temporada de una de sus series estrella, Homeland (2011-), cuyo habitual estreno de septiembre/octubre se retrasaba este año por primera vez a enero, concretamente al domingo 15. Rodada en Nueva York, esta tanda avanza un par de meses en el tiempo respecto al polémico final de la 5ª tanda (con Carrie desconectando a Quinn) y cubrirá los dos meses que separan la elección de la presidenta Elizabeth Keane de su investidura, cuando se descubra un posible ataque a su vida.
El avance confirma lo que el tráiler apuntaba hace unas semanas, y es que la amenaza del Yihadismo interno está muy presente en la preocupación nacional estadounidense (el co-creador y showrunner Alex Gansa ha dicho en más de una ocasión que antes de empezar a escribir cada temporada los guionistas se reúnen con gente de la CIA para discutir un enfoque realista a las tramas) y que Carrie -la ganadora del Emmy, Globo de Oro y Premio de la Unión de Actores Claire Danes- estará siempre en medio de los conflictos de Homeland, con el interrogante constante de si Saul y Dar Adal la ven como aliada o un problema.
Al habitual reparto se suman este año Elizabeth Marvel, Dominic Fumusa, Robert Knepper, Hill Harper o Patrick Sabongui, con Sebastian Koch repitiendo su rol del millonario Otto Düring, cuya atracción hacia la protagonista quedó patente en la temporada anterior. Del que no hay ni rastro es de Rupert Friend y su personaje de Peter Quinn, que sabemos sobrevivió su precaria condición médica pero que se nos ha asegurado está seriamente afectado por los efectos del gas sarín que inhaló. La cadena está siendo astuta y ocultándolo lo más posible del material promocional para despertar nuestra curiosidad.
Quedan dos meses para el estreno de Homeland, que recordemos está ya renovada hasta su octava tanda, por lo que quizá éste sea el comienzo de una trama más larga en el tiempo. Sea como fuere, y cómo asegura Danes en el vídeo, el ritmo no decae y las preguntas no se simplifican. Tendremos la habitual dosis de adrenalina y giros de guion al límite en vena. Vuelve Homeland.