Friends llora la muerte de Gunther, su secundario más conocido
James Michael Tyler, más conocido como Gunther por su papel en Friends, ha fallecido esta pasada noche en su casa de Los Ángeles a los 59 años a causa de un cáncer de próstata avanzado, una pérdida irreparable para la familia de una de las comedias más conocidas en la historia de la televisión.
Escribir desde el dolor la marcha de uno de los actores de tu serie favorita choca con la carcajada oculta tras las horas de televisión revisionando Friends desde la primera a la décima temporada hasta recordar los mejores momentos de ese famoso camarero que logró hacer de sí mismo en la ficción por saber hacer cappuccinos.
Esa fue la historia de un joven James Michael Tyler que, gracias a conocer a uno de los ayudantes de dirección de la serie Homefront, consiguió dejar su trabajo en el Bourgeois Pig para hacer los cafés en la ficción gracias simplemente a saber utilizar la máquina del famoso Central Perk.
En su despedida su representante, Toni Benson, confirmó que murió en paz desde su casa el domingo por la mañana, haciendo además ver cómo fue más allá de la gran pantalla: "Si conociste una vez a James, hiciste un amigo para toda la vida. Deja viuda a su esposa, Jennifer Carno, el amor de su vida. Quiso ayudar a tantas personas como pudo, compartió su historia con valentía y se convirtió en un activista para que los hombres se hagan análisis de sangre en cuanto tengan 40 años".
En el especial de Friends: la reunión, el actor no pudo estar junto a sus compañeros de cast precisamente por estar en la etapa tardía del cáncer, aunque sí apareció en una pantalla gigante dentro del evento para darle un mensaje a todos sus compañeros.
De hecho el propio James Michael Tyler habló abiertamente de su enfermedad aprovechando el impacto del especial de Friends, explicando que tenía 56 años cuando se lo diagnosticaron después de un examen del PSA, un antígeno prostático específico.
A pesar de las estrellas momentáneas que pisaron el plató de Friends, Gunther pasará a la historia como uno de los secundarios más simpáticos de la ficción sin apenas tener más que un gag multiplicado a lo largo de 10 temporadas, un valor único por su comicidad facial, el plus de extravagancia y la lástima de ese rol pagafantas amado por todos.