El Athletic le pintó los coloretes al Cádiz

Lunes para olvidar en la Tacita de Plata. Porque no se pudo disfrutar de uno de los días por antonomasia del Carnaval en la ciudad, pero el Athletic se encargó de que al Cádiz no le faltaran los coloretes, 'el uniforme sagrao en noches de Carnaval'.

Poco o nada le duró la emoción al encuentro. El equipo estaba plantándose en el campo cuando se vio sorprendido con una gran acción individual de Berenguer y cuando se quiso dar cuenta, ya iba tres goles por debajo en el marcador. Los errores fueron más que evidentes, pero sería injusto señalar cuando el equipo en general no funcionó contra los leones, ni en defensa ni en ataque.

La jornada parecía propicia para que el Cádiz lograse un respiro sobre los puestos de descenso, cada vez más cerca en las últimas jornadas. Pero quedaba lo más difícil, que los amarillos se reencontrasen con la senda del triunfo. Lejos quedó aquel Athletic indeciso de la primera vuelta, la llegada de Marcelino ha supuesto un cambio radical y pasaron como un auténtico vendaval por Carranza.

Lo peor no ha acabado

Las exigencias del calendario auguraban una difícil racha para los amarillos, no así la imagen. A diferencia de encuentros anteriores, como el del Atleti por ejemplo, hubo que aceptar con resignación la derrota al ver la falta de reacción del equipo ante la goleada visitante.

Pero lo más preocupante es que lo peor aún no ha acabado. Espera esta próxima semana el Camp Nou y, aunque sería lo ideal, no parece ser un estadio propicio para romper la dinámica de derrotas. Quien sabe si el día será ante un Betis totalmente renovado.

Donde hay que poner el foco es en los siguientes compromisos directos, ante Éibar y Alavés. Es ahí donde el Cádiz se juega la temporada y gran parte de sus aspiraciones. Las derrotas pueden costarle caras en lo anímico, pero si algo han demostrado los de Cervera estos años es que no bajan los brazos tan fácilmente. Será importante volver a contar con jugadores claves como Jonsson, Álex o José Mari, que le permitan al equipo mostrar su mejor versión.