La renovación de otro de los mejores jugadores del Sevilla, Marcos Acuña, incide en la apuesta del club de Nervión por reforzar los pilares que sustentan este proyecto deportivo de alto standing. Y estos no son otros que los defensivos. En pleno debate sobre atacar o defender, las renovaciones de Fernando y Acuña (incluso la no anunciada de Diego Carlos) vuelven a mostrar dónde está el quid de la cuestión actual blanquirroja. Pero hay dos aspectos que, unidos a ese debate estético, nos empujan hacia un juego habitual, el de las comparaciones. No son otros que la plantilla que ha configurado Monchi y los números históricos que sigue firmando Julen Lopetegui. Juguemos.
Terminado el mercado de invierno, me brotó una reflexión: la actual plantilla del Sevilla podría ser la mejor que hemos visto, al menos a color. La más completa. Enseguida hubo quien me recordó la mejor temporada que se le conoce al equipo de Nervión, la 2006-07, y el plantel de la siguiente campaña, la 2007-08, del que sólo los crueles acontecimientos sucedidos impidieron que conociéramos su alcance real. Resolver esto examinando los resultados finales es lo simple: aquel triplete histórico y la Liga peleada hasta el final es insuperable. Para valorar la plantilla actual podemos extender el juego más allá de lo simple. Así que juguemos: hagamos un 11 ideal entre el supersevilla de hace 15 años y el supersevilla actual, a ver qué nos sale, escogiendo el clásico dibujo 1-4-4-2.
Entre los palos compiten nada menos que Palop y Bono. Dando por hecho el nivel top del marroquí, reconozcamos dos cosas. Todo aquel que participara activamente en la explosión sevillista de hace tres lustros estará rodeado por siempre de una magia especial. Pero también que Palop fue decisivo el máximo nivel, incluso marcando y asistiendo. Me quedo con el valenciano. En la primera línea defensiva nos encontramos con el gran escaparate del Sevilla actual. Con todos mis respetos, no había nadie que pudiera desplazar de este once ideal a Koundé, Diego Carlos y Acuña. El lateral derecho, evidentemente, es propiedad del mejor futbolista que uno ha visto jugar en el Sánchez-Pizjuán: Daniel Alves.
Sigamos. Aquí surgen las únicas dudas. El trío de oro ideal, formado por Fernando, Renato y Banega, es imposible por cuanto el argentino ya no forma parte del Sevilla. Entraría de cabeza en un 11 ideal de toda esta nueva época dorada sevillista. De repente surge Rakitic, de indudable rendimiento top en Nervión pero cuya mejor versión no es la actual. ¿Tiene sitio? Quizás más en un 1-4-2-3-1. Aparecen también nombres como Poulsen, Maresca y Delaney, que no desbancan ni a Fernando ni a Renato; los asemejables Martí y Jordán; los llegadores Papu y Keita, el torbellino Ocampos... Pero no podríamos desaprovechar al mejor Jesús Navas por la derecha, sobre todo con Alves por detrás, ni la versatilidad de Adriano por la izquierda, ¿no creen?
Llegamos a la delantera. Igual que la defensa es el punto fuerte del actual Sevilla, el ataque era el arma más poderosa de la plantilla de hace tres lustros. La pareja que luce en pósteres, carteles, lonas y museos sevillistas, la formada por Kanouté y Luis Fabiano, es inamovible en esta entretenida comparación. Se quedarían fuera En-Nesyri, Kerzhakov y el recién llegado Martial (en este caso hablamos de un potencial contrastado fuera del Sevilla, pero aún no en España).
El alma futbolística es atraída siempre por el gol: marcarlo, ofrecerlo, provocarlo. Todo lo que sea evitarlo, reducirlo o no buscarlo genera rechazo estético y memorial. Indudablemente este Sevilla es menos espectacular que el de hace 15 años, sobre todo en su once inicial y en la manera de jugar, pero eso no lo hace peor. No hay problema en tener que recordarlo cada semana, pues hay quien sigue confundiendo jugar bien con divertir. ¿Qué equipo, aparte del Madrid, juega mejor que el Sevilla en España? En todo caso, se trata este de un juego formado por un compendio de percepciones subjetivas encaminadas a una resolución imposible. ¿Por qué? Se suele dejar de lado un factor determinante: el contexto. Ese que da forma al rendimiento objetivo final y que no sabemos cómo habría afectado a la otra parte de la comparativa. El número de títulos, de victorias o de goles deben ser ponderados en función de los rivales o del tipo de competiciones jugadas, por ejemplo. Y eso es imposible en la imaginación.
En definitiva, sólo podemos llegar a tres conclusiones inequívocas: las comparaciones son odiosas, el Sevilla juega muy bien y Lopetegui tiene en su mano un auténtico plantillón, sea o no el mejor de la historia moderna del Sevilla, cuyos números en la Liga están muy cerca del límite que ya fijó el propio Lopetegui hace unos meses.
Pero por favor.... Y a Don José Antonio REYES que además fue nuestra primera gran venta
Para mi la defensa también era mejor alves escudé drago y puerta o Adriano y del centro del campo renato y poulsen o el año siguiente keita y la delantera kanute y luisfa por supuesto pero luis fabiano con lopetegui no jugaría esta claro
Buen articulo, pero creo que falta remarcar un aspecto importante: el fútbol de hace 15 años era muy ofensivo, el del tiki-taka, el de la Eurocopa de 2008. El futbol de ahora y, sobre todo, el que permite que un club con 200M de presupuesto compita con uno de 900M, tiene que ser de maxima disciplina defensiva, para aprovechar al máximo cada gol que se marque. Según eso, el Sevilla actual es mejor que el de 2007.
Y lo mejor no seria 22 Jugadores?. con sus suplentes y demás. asi el Sevilla seria el mejor equipo de los últimos 15 años. Insuperable.
Me ha gustado el articulo, en la unica zona que haria algun cambio seria en el centro del campo, como bien dices banega no podria entrar, me quedaria con renato, poulsen y fernando.