Hemos presenciado dos partidos, que se han caracterizado por una machacona actitud de competir por parte del Bizkaia Bilbao Basket y por una inteligente alerta para no dejarse sorprender del Barça.
El primer partido empezó con una velocidad trepidante, donde los dos equipos querían correr y el que mejor corrió fue el que dominó el rebote defensivo ayudándose de una excelente defensa y no permitió correr al rival, gracias a la cantidad de rebotes ofensivos de los que dispuso, que fue el Barça.
En el segundo se cambiaron las tornas y la actitud, corazón y bravura del Bilbao Basket propició, a pesar de la altura de los hombres del Barça, que los rebotes fuesen propios, cosa que no supo gestionar para ganar el partido.
Esperamos que siga ésta bravura y corazón, pero que veamos menos tiros imposibles y heroicos y más de los conseguidos por el buen hacer táctico.
Y a los jugadores, le enviaría éste mensaje al oído, del “Sombrerero Loco” a Alicia en el País de las Miribillas, perdón Maravillas: “Sólo es imposible, si crees que lo es”