El viaje para jugar contra el Mirandés había suscitado confianza después de lo del Fuenlabrada; parecía posible marcar algún gol para poner la eliminatoria más fácil, pero aunque el 1-0 se pueda remontar con el apoyo de nuestra soberana afición, habrá que tener mucha concentración atrás para evitar riesgos. Esta vez la suerte apareció para el contrario al marcar el único gol en el minuto 4 en disparo desde unos 25 metros; después el Recre llegaría varias veces sin la efectividad de otras ocasiones. Cuesta mucho dejar la categoría B si no hay un equipo compacto, duro y con algo de ratonería. El próximo domingo a las 19:00h, en el encuentro de vuelta, el Nuevo Colombino volverá a ser la mejor baza para alcanzar la última eliminatoria. La afición será la que marque otra imagen, igual al día del Fuenlabrada, que aun con el 0-3 puso más de un corazón en peligro. No hace falta que se le pida un nuevo esfuerzo, porque me consta su entrega desde el minuto 1 hasta el final. Espero que desde la plantilla hasta el último aficionado seamos un bloque unido en pro de nuestro Recre. No más 2ª B, ni la afición, ni su estadio, ni su decanato merecen seguir en una categoría que es un pozo del que tanto cuesta salir. La lección que ha dado la afición, que ha sido acogida en As, Marca y otros diarios, me ha llenado de orgullo como choquero, onubense y huelvano, igual da, ya que todo ello significa Huelva. Suerte y a esperar lo mejor, que será superar la eliminatoria con un poquito más de profundidad.
Solo me queda enviar a mi amigo y míster Marcelino, junto a Rubén Uría, un saludo y agradecerle su deferencia y atención ante las peticiones de los que le admiramos de fotos y saludos siempre con una sonrisa.