La verdad es que el Valencia CF necesita una revoluciónm pero aún con más urgencia precisa reforzar lo que ya tiene, por lo que empezar el mercado de fichajes de invierno poniendo nombres como el de Dani Parejo sobre la mesa para aligerar la plantilla antes de comprar me parece que es empezar la casa por el tejado. Es un avance y un consuelo que la presidenta anunciara que iban a haber fichajes tras reunirse con Peter Lim; pero de nada sirve reforzarse si desmontamos lo poco que tiene de valor este Valencia.
En verano, con varios meses por delante para reconstruir el bloque, se puede hablar de vender a futbolistas como Dani Parejo, pero ahora mismo es una locura. Si el conjunto de Mestalla se desprende de su mejor centrocampista y uno de sus puntales cometerá un error. El de Coslada es, de largo, uno de los futbolistas con más personalidad en el equipo. Repasaría todas sus estadísticas, pero con decir que lo ha jugado todo, y que está entre los máximos goleadores (de un pésimo Valencia, lo sé), está dicho todo.
Parejo la pide, no se esconde y sí, pierde balones, pero sólo los pierde el que los pide, el que los juega y el que los busca.
También entiendo a aquellos que lo crucificaron por su actitud en verano. Quería irse y estuvo apartado. Lo reconozco, a mí tampoco me gustó. Pero tomada la decisión de perdonarle, es un poco miserable pasarle cuentas por eso a estas alturas ¿no creen? Si se hace borrón y cuenta nueva, se hace a todos los efectos. Por parte del club, y por supuesto también por parte del jugador.
Comprendo a los seguidores que no entendieron -no entendimos- que abandonara la capitanía por presión la temporada pasada y ahora vuelva a ostentarla y lucirla, no sé si por petición propia, por descarte o por petición de sus entrenadores. Lo cierto es que el tío sale al campo, se pone el brazalete y no se esconde. Para mi son argumentos más que suficientes para no ajusticiarle ahora, y mucho menos sin un sustituto preparado.
Si el Valencia necesita hacer caja, que el director deportivo y la secretaría técnica se estrujen para desprenderse de auténticos zotes deportivos que hay en el equipo o en las posiciones donde sobran jugadores (portería, por ejemplo); pero desvestir un santo para vestir otro sería una auténtica barbaridad; casi comparable con cerrar una plantilla en verano que no tenía mediocentro defensivo ni un nueve titular. Sí, porque el problema del equipo que confeccionó el club bajo la tutela de Suso García Pitarch es que es una plantilla manifiestamente incompleta, pero también manifiestamente corta. Prescindir de un centrocampista, tu mejor medio, cuando tienes escasez de efectivos en esa zona del campo es comenzar la casa por el tejado. Feliz semana.
David Torres
Delegado de ElDesmarque Valencia