"Buenos días. Me llamo Gabriel, tengo cuatro años pero cumplo cinco en octubre y estoy triste. Mi amigo José Juan ya no está en el Betis de niños. Ahora se pone a escribir mi padre, que yo todavía no sé bien y me corrige las faltas.
Estoy triste porque yo no quería que se fuera, pero mi padre me dice que era lo mejor. Si es así, así será. Ya sé que el Betis de niños no ha ganado y que tendrá que seguir otra vez donde estaba. Que en el fútbol hay que ganar muchas veces, pero no siempre se puede ganar. Mi padre me dice que el fútbol de mayores está para eso, para ganar, y que para aprender estamos en otras categorías menores. Y que el Betis de niños está para las dos cosas: para ganar y para aprender.
Mi amigo José Juan quería ganar siempre, pero también enseñar. Y como en el Betis le decían que lo primordial era enseñar... Entonces no entiendo por qué no sigue, si daba igual ganar o no. Habrá sido una de las muchas mentiras que ha tenido que escuchar mi amigo en estos años en su Betis. Como mi Betis. Llegó para cumplir un sueño y se va con la ilusión de cumplir otro sueño. Pero se va tras sufrir casi más que celebrar y no por haber bajado al equipo o por aquel ascenso en Lorca. O por haber cumplido con creces su tarea de enseñar en el Betis de niños.
Las mentiras no están bien, nunca hay que decir mentiras, que si no mi padre me castiga. Pues me parece que en el Betis de mi amigo José Juan, bueno ya no, más de uno tendría un castigo gordo. Por lo menos dos meses sin juguetes.
Mi amigo llegó con más pelo en la cabeza del que tiene ahora y le pasa como a mi padre. Será de la presión y del estrés. Pero se va, o se tiene que ir, con una sonrisa por el cariño de mucha gente. Y no sólo del Betis, que sé de algún sevillista que le ha dado las gracias. Vaya detalle más grande. También en la que ha sido su casa hay mucha gente que le quiere y otra que le tiene envidia. ¿Por qué dirá tanto mi padre la palabra ego y el Betis? A lo mejor por eso no ha podido hablar mucho en este tiempo o se ha llevado un chasco importante con el que era su ídolo. Señor Lorenzo, esa cantera no se puede tratar así. Ahí usted no lo ha hecho bien. Y lo sabe. Han perdido a un gran entrenador, por no hacerle caso.
Pero tampoco se han portado bien los dueños del Betis. Porque mi padre siempre me dice que hay que ir de frente, con la verdad por delante, y si tanto han apoyado a mi amigo no entiendo por qué no sigue. El señor Haro y el señor Catalán se han equivocado porque no han ido con la verdad. Que sí, que el Betis de niños no ha ascendido, pero las palmaditas en la espalda se daban hace mucho tiempo. Ya no, ahora estamos en una época de tecnología, de ver fichajes por programas de ordenador y de dar el sitio a los que saben. Y mi amigo sabe mucho de fútbol.
Se va con el recuerdo del gol de Lorca, cuando desde el cielo hubo quien ayudó a De la Hoz a saltar y marcar. Se va como padrino de Loren, Junior y otros muchos más. El que de verdad creyó en ellos, no se crean otras historias porque más de uno quería mandar lejos a los chavales. Y se va con el sueño de volver algún día. Ojalá que para mi Comunión pueda ir al campo del Betis y allí esté mi amigo José Juan. Con su gorra, la que tenga que comprar otra vez, y su escudo del Betis. El que lleva en el pecho y el alma".
Hasta se acuerda de cuando llegó Jose Juan Romero que tenía más pelo. Si restamos cuando Jose Juán Romero llegó al Betis, hace 2 o 3 años, a la edad del niño, este niño tenía entonces 2 años. Asi que hasta tomando el pecho de su madre, notaba el pelazo que llevaba Jose Juan. Este niño además de saber tela del Betis, sabe bastante sobre alopecia nerviosa. No nos tomen el pelo a los Béticos y que vaya de frente el que escribe esto y no se escude en su hijo.
Estoy con Betico. Ni un niño de 4 años dice la palabra "chasco", ni entiende de entresijos béticos. Os la han dao con queso. Por cierto, de literatura preciosa... será porque le has puesto voz de niño en tu imaginación porque lo ve veo lo emotivo. Estoy con el "niño" de que NUNCA se debió echar a José Juan Romero. Y que Lorenzo tiene la culpa? Visto lo visto me suena más a Catalán que parece que es el que lleva ahora la batuta.
Bético, un niño de cuatro años, es tu edad mental. Se dice que más vale estar callado y parecer tonto, que decir algo y confirmarlo...
Ojalá seas alguien grande en nuestro BETIS. Aunque no tenga que pasar mucho tiempo. Preciosa carta, por cierto.
#1 Bético:¿Eso es lo único que puedes aportar a tan maravillosa carta? ...no has entendido nada...
Un niño con 4 años escribe eso?