El asturiano Walter Bouzán y el gallego Álvaro Fernández Fiuza han ganado, con un tiempo de 1 hora 6 minutos y 43 segundos, la 78ª edición del Descenso Internacional del Sella, una prueba en la que ya se habían impuesto en las últimas cuatro ediciones disputadas.
La 'manita' con la que los vencedores festejaron su triunfo bajo el puente de Ribadesella constituye un récord en la historia de la prueba en la que, hasta ahora, sólo el 'rey del Sella' -el cántabro Julio Martínez, con once victorias- había logrado vencer cuatro veces seguidas con el mismo acompañante en la piragua. En la multitudinaria salida de Arriondas, la K-2 ganadora tuvo algunos problemas para arrancar entre las 644 embarcaciones participantes -con 895 palistas de diecisiete países- lo que permitió a Martínez y José Julián Becerro tomar la cabeza junto a los sudafricanos Andrew Birkett y Greg Low, dos parejas que se habían visto más favorecidas en el sorteo de salida. Con miles de personas participando desde las orillas del río en la 'Fiesta de las Piraguas', los palistas afrontaron los veinte kilómetros del recorrido por un cauce con un elevado caudal que dificultaba la posibilidad de acercarse al récord de la prueba, fijado desde 2009 en 1 hora 1 minuto y 14 segundos. El ritmo más lento que en otras ediciones permitió que, por primera vez en los últimos años, seis embarcaciones bajaran juntas en cabeza durante todo el recorrido hasta la llegada a los últimos cinco kilómetros, los correspondientes a la ría de Ribadesella en los que la marea estaba subiendo y ralentizaba así su avance. La igualdad entre el grupo de cabeza continuó hasta el último kilómetro donde un cambio de ritmo de Bouzán y Fiuza rompió al grupo y les permitió imponerse con solvencia en el sprint a Emilio Merchán e Iván Alonso, que lograron la segunda posición por delante de la pareja sudafricana en un tiempo similar al de los vencedores. Esta 78ª edición del descenso sirvió además para que el diez veces campeón del mundo de maratón, el asturiano Manuel Busto, obtuviera a sus 39 años un nuevo triunfo en la categoría de K-1, tras un apretado esprint con Kiko Vega, tras anunciar que no competirá más en el Sella y que sólo volverá "a disfrutarlo" como lo hacía de niño cuando acudía al Sella con sus abuelos. La prueba ha dejado las habituales escenas de 'selleros' bañándose mientras disfrutaban de la multitudinaria fiesta que se celebra desde los días previos a la disputa de la prueba deportiva en la que este año ha ejercido como pregonero el vicepresidente Comité Paralímpico Español, José Alberto Álvarez, Motocicletas y coches han seguido el recorrido de los piragüistas desde la carretera que sigue el cauce del Sella entre Arriondas y Ribadesella mientras que un millar de personas hacía lo propio a bordo del tren fluvial que se fleta cada año para ver la prueba. Con seis mil plazas de acampada habilitadas en Ribadesella, el Descenso del Sella tiene además en marcha desde ayer un Plan de Seguridad que movilizará unos 800 miembros de servicios de emergencias y seguridad ciudadana del Principado de Asturias, de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y de varios ayuntamientos