El mexicano Eder Sánchez finalizó hoy en 16º lugar en los 20 kilómetros marcha de los Mundiales de Pekín, un meritorio puesto después de varios años fuera de la competición internacional a causa de las lesiones, que le han dejado, declaró, con "hambre de estar otra vez en los primeros lugares"."Estoy muy contento de volver a la alta competencia, no esperaba este buen resultado y me conformaba con estar entre los 35 primeros", señaló a Efe el marchador de 29 años, que cosechó en Pekín la mejor actuación mexicana de la prueba (Horacio Nava fue 29º y Julio César Salazar 32º).
"Traté de estar pegado al grupo puntero en los primeros 10 kilómetros, pero al recibir mi primera tarjeta intenté cuidar mi técnica", relató el corredor, bronce en los Mundiales de Berlín 2009 y en la Copa del Mundo de 2008.
"Al final hubo un sprint que yo ya no traigo porque no he competido a gran nivel", reconoció, añadiendo que ahora hay que prepararse día a día porque los Juegos Olímpicos están "a la vuelta de la esquina".
Sánchez afirmó que tras las intervenciones quirúrgicas aún no esta al 100 por 100 y sintió aún molestias en la pierna durante la carrera, aunque se mostró confiado en su plena recuperación de forma progresiva.
"Vamos a lograr cosas muy grandes", predijo con optimismo Sánchez, quien también tuvo palabras de felicitación para el español Miguel Ángel López por su oro en la prueba.
"Es un amigazo del alma, nos conocemos desde pequeños y ya se veía venir que tendría un triunfo como éste", declaró.
"Hay que aprender de lo bueno que está haciendo y hay que seguirle los pasos, pues está haciendo las cosas muy bien", añadió el marchador mexicano.