Ruth Beitia, campeona olímpica de altura y diputada del PP en el parlamento de Cantabria, se declaró "sorprendida" por el triunfo de Donald Trump en las elecciones estadounidenses, ya que hubiera preferido a Hillary Clinton porque "era la menos mala"."Estoy un poco sorprendida con el resultado, después de los debates que han tenido entre ellos, porque era una tremenda locura lo que llegaba a España. Mi candidata era Hillary porque era la menos mala, pero lo cierto es que ha ganado Trump. A ver qué ocurre", declaró a EFE tras dar la salida a la primera carrera GOfit de Madrid.
Ante la pregunta de si le daba pena que fuera agotándose su gran año de gloria, observó: "En realidad tengo hasta el 1 de abril para seguir con mis 37 años, que es lo mejor que me ha podido pasar en esta vida, los 37, pero estoy feliz, ha salido todo fenomenal".
Campeona de España, de Europa y olímpica, ganadora de la Diamond League por segundo año consecutivo, elegida mejor atleta europea del año, no supo citar un solo aspecto que le haya salido mal esta temporada.
"¿Algo que te haya salido mal este año?. Ni siquiera se me ha pegado el arroz, y si se me pega, me gusta el socarrat. Todo lo que hago, lo hago con muchísima ilusión y muchas ganas, y ese es el secreto para que todo fluya y salga bien", comentó.
Beitia no ha tenido vacaciones. Acabó de competir el 1 de septiembre y cuando regresó empezó a trabajar en el parlamento cántabro.
"Mis vacaciones fueron en agosto. Empecé a trabajar en cuanto llegué, el 5 de septiembre, y en cuanto a desconexión, sin entrenar, he estado un mes. Acabé de competir el 1 de septiembre en Zúrich, y el 5 a trabajar en el parlamento.
"Habré engordado kilo y medio. Ahora empezamos a entrenar y a hacer cargas, trabajo de base, y Ramón me tiene con un cinturón lastrado de 3 kilos. El músculo se convirtió en grasa y ahora vuelve a ser músculo. Estoy entrenando fenomenal y comiendo muy bien, en Río estaba muy delgada", confesó.
No piensan introducir novedades en los entrenamientos. "Vamos a seguir por donde vamos, que es un trabajo increíble y seguir disfrutando. Llevamos 26 años juntos y no creo que ahora sea el momento para hacer ningún tipo de cambio en el entrenamiento".
"El otro día le preguntaba a Ramón: ¿tú crees que con mi edad me conviene rodar diez minutos?, y me decía: para qué, vamos a aprovecharlo más en intensidad, multisaltos. Noto que cada día me cuesta más recuperar, me encuentro más cansada, pero también es que ha sido una vorágine increíble, dos meses frenéticos".
Durante estos meses ha sentido "el cariño de la gente" pero también ha tenido que abandonar la zona se confort de su rutina.
"Ha sido salirme de mi rutina, y como soy una persona que siempre voy con la agenda, controlando todos los tiempos, se me fue un poquito eso. En cuanto vuelva a la rutina volveré a estar menos cansada, a entrenar bien, a ser la Ruth de siempre", aseguró.
Desde su título olímpico no ha dejado de recibir homenajes y galardones: "En mi agenda está apuntado todo, es un placer que te den esa respuesta a la mejor temporada de tu vida. Hace 26 años Ramón (Torralbo, su entrenador de siempre) me cogió de la mano para cumplir mis sueños y ahora esos sueños compartidos se han hecho realidad".
También en el plano político le ha ido bien. "A mi me extrañaba cuando la gente pedía la dimisión de Rajoy. Es como si a mí me dijeran: tú has ganado las Olimpiadas, hala, adiós muy buenas, tienes que dejarlo. Al final está el Gobierno que la mayoría de los españoles querían".
Su programa de competición para la temporada próxima no cambia con respecto a las anteriores: "Pista cubierta, como siempre. No entiendo entrenar sin competir, y luego el aire libre. También la Dioamond League, claro. Que la vida me dé la oportunidad de seguir compitiendo es algo que hay que aprovechar. Esta es mi pasión, ha dejado de ser una profesión. Aunque, entre comillas, lo hayamos conseguido todo, aún me queda una ilusión increíble y esa pasión hay que seguir paseándola por las pistas mundiales".
Tuvo palabras de agradecimiento para todo su equipo. "Estos meses la que más trabajo ha tenido ha sido Julia (García), mi representante, que la pobre no da más, su teléfono dice que es para mí, y ha hecho un trabajo increíble. Fue un gran placer tener en Río a los tres: Ramón, Julia y Toñi (Martos, psicóloga). Lo importante es que cada vez que voy a entrenar estoy deseándolo, es el momento de dejar el teléfono en el coche y de darlo todo".
"Con Ramón hay una relación increíble", explicó. "Él sabe que cuando le digo un poco más, sabe que puedo dar un poco más y si le digo que menos, menos. Cuando tenemos ese equilibrio, esa confianza, esa sensación de que con una mirada nos lo decimos todo, es algo fantástico. Un equipazo el que formamos que va mucho más allá de lo deportivo. Tengo plena confianza en él para mover ficha, igual que mis padres. Porque tengo un padre, que si no, sería como un padre. Me he criado con sus hijos y es una persona que siempre quedará ahí".
Con respecto al futuro, apuntó: "El deporte seguirá en mi vida, está claro, pero no será el atletismo. Sigo estudiando psicología, primer año, en la UCAM, y en principio pienso hacer un curso cada dos años".