Arcilla luchará por su "última bala en la recámara" en 20 kilómetros
El marchador Francisco Arcilla se jugará la "última bala" en el campeonato de España de 20 kilómetros marcha que se disputa el 18 de marzo en Castellón, después de perder sus opciones de estar en la Copa del Mundo de Taicang (China) en la distancia de 50 kilómetros al concluir séptimo en el nacional.El atleta leonés del Playas de Castellón buscará la única plaza que hay en juego para la cita mundialista en la distancia, en la que se ganó también el billete para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, al existir ya tres atletas preseleccionados Miguel Ángel López, Álvaro Martín y Alberto Amezcua.
"Será muy complicado porque hay muchos atletas en condiciones de lograr esa plaza, pero intentaré luchar al máximo a pesar de las dificultades de esta temporada marcada por las lesiones que me han impedido tener continuidad en los entrenamientos", ha señalado en declaraciones a Efe.
Entre los rivales ha destacado a Manuel Bermúdez, "dentro de un amplio abanico", aunque ha confiado en sus "galones" en una prueba que ha alternado en los últimos años con la de mayor longitud, los 50 kilómetros.
Sin embargo, la escasa preparación con la que llegó el pasado fin de semana al campeonato de España disputado en Burjassot (Castellón) acabaron privándole de poder luchar por las cuatro plazas que había en juego, aunque la última quedará a criterio del comité técnico que la otorgará en función de la proyección de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y el historial con la selección española.
Arcilla ha reconocido que será "muy complicado" que pueda optar a esta plaza en la distancia mayor de la marcha atlética, a pesar de que el pasado año en la Copa de Europa fue el primer español bajando de las 4 horas, registro que este año ha superado ampliamente hasta las 4:22:48 que empleó en el nacional.
El marchador leonés, que ha compartido entrenamientos con el reciente campeón de España de carreras de montaña Pablo Villa, ha podido reanudar con normalidad la preparación después de superar sus molestias de inflamación en el talón de aquiles.