City Sightseeing, multinacional española de experiencias turísticas, ha organizado un tour especial para familiares y amigos de Abel Antón por el itinerario del maratón de 1999. El atleta, doble campeón del mundo de maratón, ha vuelto a recorrer las mismas calles de Sevilla en las que se impuso en el Mundial de Atletismo de 1999, pero esta vez a bordo de un autobús panorámico de City Sightseeing, que ha ofrecido un tour guiado privado a familiares y amigos para celebrar el 25º Aniversario de su triunfo.
Así lo revive el propio Abel Antón, quien ya fue homenajeado en el 20 aniversario de su medalla de oro: "Mi sensaciones son de muchos recuerdos. Cuando hemos hecho el recorrido desde la salida del maratón hasta la entrada otra vez, se puede decir que casi metro por metro me iba acordando de la carrera. Yo siempre he sido un atleta muy táctico, recordar los buenos momentos cuando cambiaba, qué rivales tenía en cada momento, cuando entraba en el Parque de María Luisa en la última vuelta...", recuerda el atleta, galardonado con el Premio DEX 2019 Ejemplo.
Lo más especial para mí es ese kilómetro en el que el italiano, el portugués y el keniata, pero sobre todo el italiano. Ese momento táctico que se ha hablado de que ahora bebes agua, se la das tú, luego no le dejas beber", relata
Fue entonces cuando decidió que tenía que dar el extra: "Sato, el japonés, iba delante, a unos 400 metros. No había que apurar más tiempo, había que ir a por él. Fue el momento de dar el tirón importante. De 3 minutos el kilómetro me puse a d:45 el kilómetro. Esa era la manera de cogerlo. Ahí es donde sabía que lo iba a coger, que lo iba a pasar y luego, al final, es cuando me vinieron los mejores recuerdos de ese día, de la maratón, para llegar aquí a La Cartuja con 65.000 espectadores", recuerda con cariño.
Y es que el calor de la afición sevillana no se le ha ido de la memoria: "Entrar ganador en su tierra es lo más grande para un deportista, más en Sevilla, con lo que animan los sevillanos, aunque en verano siempre hace calor. Entrar y ganar es lo más grande que le puede ocurrir a un deportista", comenta con añoranza. Asimismo, admite que suele regresar a la ciudad de vez en cuando: "Hemos hecho muchos reportajes durante estos 25 años. Vengo a la maratón todos los años. Son recuerdos maravillosos. Parece que fue ayer, pero lo conozco metro a metro todo porque eso no se olvida".
Para Abel Antón, el momento cumbre fueron los últimos metros, en los que ya sabía que, si nada se torcía, volvería a ganar la medalla de oro: "La sensación más bonita de toda la maratón es cuando estás primero en el momento de las medallas. Venía de ganar un campeonato del mundo, pero en el momento en el que iba cambiándome, me venía con fuerzas de ganar al japonés y que me iba a lanzar faltando tres kilómetros... Ser dos veces campeón del mundo es la primera vez que se hacía en la historia", recuerda.
Aunque, eso sí, del momento de entrar a la meta no tiene tantos recuerdos, tal y como él mismo admite: "Ganar en tu casa es un pensamiento que te da más fuerza, corrías más. Fue el momento más importante para mí, se podría decir, de mi carrera deportiva. Entras al estadio con 65.000 personas que se levantan, te animan, y se te nubla la mente. No piensas en nada, solamente en que tienes que entrar en la meta. Pero los momentos más importantes son justo antes de ver que vas a ser campeón".