"La Federación desde el minuto cero ha estado siempre abierta a negociar todos y cada uno de los puntos que ASOBAL ha planteado. Busquemos un punto en común, que los tenemos, el bien del balonmano. El problema es que la Federación no ha estado dispuesta en este convenio a dar un cheque en blanco a ASOBAL", señaló Blázquez.
En este sentido, el presidente de la Federación redujo a dos los puntos que en estos momentos separan las posiciones de ambas instituciones para acordar un nuevo convenio.
El primero es la voluntad de la Federación, que según lo fijado en las negociaciones se encargaría de organizar la Copa del Rey, de gestionar los derechos de imagen de las primeras rondas del torneo copero.
"Lo que siempre se habló fue ceder a ASOBAL los derechos de imagen de la fase final de la Copa del Rey, al entender que ASOBAL podría tener una merma económica si no tenía la fase final", explicó Blázquez en un encuentro con los medios.
"Pero la Federación gestionaría los derechos de imagen de las rondas previas con la intención de poder darle una mayor visibilidad al balonmano español. Intentar que tengamos partidos que se puedan ver en abierto", añadió el presidente de la Federación.
Un reparto al que, según Blázquez, la ASOBAL no se muestra favorable al entender que ella debe ser la que negocie "el computo total" de los derechos.
La otra fuente de discrepancias entre la Federación y la Asociación de Clubes, según señaló Francisco Blázquez, reside en la cláusula por la que ASOBAL tendrían la potestad de expulsar a un equipo de la competición si no cumple los requisitos establecidos por la propia Asociación.
"En este sentido, entendemos que la ASOBAL no es competente para poder excluir a un equipo de la competición, ya que eso es algo que compete a los órganos jurisdiccionales de la Federación, no a ASOBAL", indicó el Blázquez.
Divergencias que han llevado a la Federación y a la ASOBAL a enzarzarse en una tensa disputa, que vivió el miércoles su último capítulo con la "recomendación" de la Asociación de Clubes a sus asociados de "impugnar" los acuerdos aprobados en la última asamblea de la Federación y que afectan a la ASOBAL, al entender que "no se ajustan al convenio vigente entre ambas entidades".
Esta medida, a juicio de Francisco Blázquez, carece del cualquier posibilidad de fructificar, ya que, recalcó, "para impugnar algo se ha debido cometer alguna ilegalidad y la Federación, que es absolutamente escrupulosa en el tema jurídico y legislativo, no ha incumplido absolutamente nada".
Una interpretación diferente a la de la ASOBAL, que entiende que el convenio presentado por Francisco Blázquez y aprobado por la Asamblea, celebrada el pasado sábado en Oropesa del Mar, no se ajusta a lo acordado en la reunión mantenida por la Federación y la ASOBAL con el secretario de Estado, José Ramón Lete.
Circunstancia que llevó a la ASOBAL a reclamar la intervención del Consejo Superior de Deportes, una solicitud que la Federación Española de Balonmano no considera necesaria.
"Nosotros somos los que tenemos que solucionar nuestros problemas, no tenemos que involucrar a nadie y mucho menos poner en un aprieto al Consejo Superior de Deportes, porque no es beneficioso para nadie, tenemos que solucionarlo entre la gente del balonmano. Buscar un punto de entendimiento que seguro que lo vamos a encontrar", concluyó Blázquez.