El combinado tunecino se retiró al descanso con tres goles de ventaja (12-9) después de una primera parte que estuvo mejor en el juego y en el marcador.
Croacia tuvo la virtud de no dejar escapar a su rival y, cuando el partido estuvo otra vez igualado, mostrar su experiencia internacional y calidad para sentenciarlo con un último ataque que no desaprovechó.
Antes España, que había perdido la semifinal precisamente ante Croacia en la prórroga, se impuso por la medalla de bronce a Turquía en el mismo escenario, el Palacio de los Deportes de Campclar, por un claro resultado de 30-19 para los de Jordi Ribera.