El seleccionador español masculino absoluto de balonmano, Jordi Ribera, se mostró "satisfecho" tras el partido frente a Arabia Saudí por la "colaboración e implicación de todos los jugadores" en el mismo.
En declaraciones a Efe, Ribera aseguró tajantemente que es "esencial que todos los jugadoras puedan participar del juego y aportar", por lo que "no hay un equipo A y un equipo B; aquí todo el mundo sabe cuál es su papel".
El seleccionador también destacó el "buen nivel de ataque" que tuvo el equipo, "especialmente en la primera parte". En defensa, la 5:1 "obligaba a una mayor movilidad", mientras que la 6:0 permitió "robar muchos más balones".
En cualquier caso, reconoció que en la última fase del partido, el combinado nacional "se ha relajado un poco, sobre todo en el trabajo defensivo".
Respecto al rival de este viernes, Polonia, Ribera es consciente de que "tiene un estilo de balonmano diferente", por lo que los hispanos deberán "adaptarse a una defensa más cerrada y con gente más alta".
Ángel Fernández, elegido mejor jugador de la selección española en el partido de este jueves, destacó al final del encuentro las "ganas de todo el equipo de comenzar a competir" tras un buen número de entrenamientos.
El cántabro del Vive Kielce no dudó en señalar que todos los hispanos salieron "a tope". "Llegábamos con la intención de probarnos y ver cómo nos conjuntábamos en la pista", añadió.
Respecto a su galardón como jugador más valioso de la selección, Fernández le restó importancia puesto que "lo importante es coger sensaciones y confianza" para acoplarnse, si bien reconoció sentirse "a gusto".