Una cámara de vigilancia ha captado un tiroteo en el que un niño de 11 años arremete contra otros dos jóvenes de 13 después de coger una pistola del coche de su madre.
Ocurrió después de un entrenamiento de fútbol americano en Apopoka, Florida. Según la policía, basándose en las imágenes grabas por la cámara de vigilancia, el niño autor del disparo corría hacia el coche perseguido por los otros dos jóvenes. Es entonces cuando, después de entrar en el vehículo, sacó un arma de fuego y disparó una vez, alcanzando a los otros dos.
En el vídeo se ve claramente como el disparo va dirigido al niño que tiene más cerca, impactándole a una distancia cercana en la espalda. Además, la misma bala afectó al otro chico, perforándole el brazo.
La policía detuvo al autor de los hechos bajo el cargo de intento de asesinato en segundo grado. Además, resaltaron que el arma, una pistola de calibre 9mm de munición real, se encontraba en una caja sin seguridad situada en la guantera del vehículo de la madre. En Florida, es ilegal que los niños puedan tener ese tipo de acceso a las armas de fuego.
La madre explicó a la policía que ella le había dicho a su hijo que no cogiera el arma de fuego ya que era para su protección. El agente encargado del caso que atendió a los medios de comunicación aseguró que se encargarán de que el autor de los hechos reciba la ayuda que necesita.
Según la declaración jurada de algunos de los testigos, las víctimas del tiroteo hacían bullying al niño de 11 años, intimidándole con golpes y puñetazos en la cara. Además, otras personas que estuvieron en el entrenamiento aseguran que vieron a los jóvenes peleando por una bolsa de patatas fritas.