El consejo de Rafa Muñoz sobre el suicidio tras dos intentos: "A la gente que tenga pensamientos recurrentes, pedid ayuda"
En el Día Mundial de la Salud Mental, ElDesmarque habla con Rafa Muñoz sobre sus peores momentos tras conseguir el récord del mundo. El nadador cordobés entró en un cuadro depresivo que terminó con dos intentos de suicidio.
En 2009, Muñoz logró uno de los grandes sueños de su carrera: la plusmarca mundial de 50 metros mariposa, arrebatándosela al gran sudafricano Roland Schoeman. Ese shock, a priori positivo, le provocó entrar en un grave proceso mental. “El hablar de suicidio da miedo. Es como hablar de cáncer, pero el cáncer sí lo puedes controlar y el tema de suicidio, sí”, confiesa el nadador a ElDesmarque.
En aquel momento, el nadador español tenía solo 20 años y encontró a su 'salvador' a tiempo: “Yo no creía en la profesión de psicólogo, pero desde el momento en el que acudí a uno… a mí me ha salvado la vida un psicológico, no el deporte. Sí, un psicólogo me ha salvado la vida. Que es José Carlos Jaenes y estoy eternamente agradecido con él”.
La profesión de psicólogo ha estado durante décadas 'vetada' en el deporte de élite y en la sociedad en general. “Un psicólogo está ahí como están los dentistas o los peluqueros. Unos te ponen más guapo, otros te ponen los dientes más bonitos y un psicólogo te ordena tus pensamientos y tus ideas. Te ayuda a salir adelante”, resalta el ex nadador.
Un tema tabú en el deporte que, en muchas ocasiones, se pone en duda o se minusvalora. “Las gentes que duden de la salud mental, son gente de un pensamiento muy antiguo”, afirma Muñoz.
El consejo de Rafa Muñoz
Unos problemas que solo se solucionan buscando ayuda y, para ello, se necesita hacerlos públicos a tu entorno: “Por ponerle un poco de coña al asunto: una depresión es como las almorranas, se sufre en silencio. Quiero que la gente sepa que tiene solución. En el momento en el que tengan pensamientos rumiantes y recurrentes que no van hacia la vida, si no hacia otra cosa… que se pongan con un profesional. Lo más importante para empezar a darte cuenta de que tienes un problema es exteriorizarlo”