Este sábado 21 de octubre tendrá lugar en Málaga, dentro del Test Event, evento coorganizado por la Federación Española de Triatlón y la Junta de Andalucía, la Copa del Mundo de Triatlón Paralímpico, prueba clasificatoria para los Juegos Paralímpicos de París. En la lista de la Selección Española se encuentra Kini Carrasco, que hará historia al convertirse en el primer triatleta Paralímpico en hacer 100 salidas en el ranking internacional.
El extremeño, a sus 58 años, tiene entre ceja y ceja el objetivo de estar en Paris, donde competiría en sus cuartos Juegos Paralímpicos, tras haber estado en Seúl 88, Barcelona 92 y Sídney 2000. De lograr el billete a la capital gala, volvería 24 años después a unos Juegos, y lo haría además cambiando de deporte, porque en las tres anteriores ocasiones lo hizo como atleta en pruebas de velocidad.
Kini empezó su carrera deportiva ligada al baloncesto, donde llegaría a jugar con el Cáceres en segunda división, pero un accidente de moto en el que perdió su brazo izquierdo le cambió la vida a los 20 años.
Pregunta: ¿Cómo está Kini Carrasco a la espera de llegar a las 100 salidas en el ranking internacional y hacer historia en el Test Event de Málaga?
Respuesta: Estoy muy ilusionado porque voy a ser el primer triatleta paralímpico en llegar a esa cifra. Es algo más que voy sumando, otra muesca en mi revolver.
P: ¿Y hay fecha de caducidad a tus 58 años o todavía te queda cuerda para rato?
R: Bueno, he pensado en colgar el tritraje parcialmente, después de los Juegos, esté o no esté, voy a dejar de pegarme por los puntos y por ver que clasificación tengo en el ranking. Dejaré la élite del triatlón paralímpico, pero seguiré haciendo Grupos de Edad si dios quiere por lo menos hasta los 80 años.
P: ¿Tu objetivo ahora mismo número 1 es estar en París?
R: Si, me encanta los retos, y este es otro reto para mí. Preguntarme si será capaz de estar en unos Juegos 24 años después y en un deporte distinto. Es algo que creo que no se ha hecho nunca y espero poder conseguirlo. Si no es así me quedaré en el intento, pero de momento llevamos buen camino, estoy en la quinta posición del ranking.
P: ¿Y Málaga la siguiente cita para ello en la Copa del Mundo?
R: Sí, Es la última prueba y vengo a disfrutar. Es una ciudad preciosa con un circuito muy bonito y en el que el público seguro nos empujará mucho.
P: Para el que no te conozca, tu ibas para estrella del baloncesto…
R: Sí, mi pasión era el baloncesto y jugué desde pequeñito hasta los 20 años. Pero el 30 de enero de 1985 tuve el accidente. Ese día, como dijo siempre, me arrancaron un brazo. Iba en una moto, un coche chocó contra mi y cuando me levanté de carretera me di cuenta de que mi brazo izquierdo se había quedado en el camino. Fue, parafraseando al triatlón, la primera transición de mi vida. Me pasé al atletismo y conseguí estar en tres Juegos Paralímpicos, Seúl, Barcelona y Sídney, hasta que en 2011 me pasé al triatlon.
P: ¿Cuánto influyo el deporte en tu vida para volver a ser feliz tras el accidente?
R: Lo dijo muchas veces, el accidente fue algo muy trágico para mí, y supe a través del deporte convertirlo en una gran virtud. No hubiera sido el mismo sin el accidente, no hubiera podido conseguir todo lo que he conseguido, sería una persona completamente distinta. Además, el afán de superación me hizo volver a aprender a atarme las zapatillas o pelar una fruta con solo una mano o a lavarme la cara o ponerme el reloj. Todo esto me ayudó a salir de un bucle sin salida.
P: ¿El triatlón es tan importante en tu vida que te has casado con una triatleta e hincaste rodilla en el pasado Europeo de Bilbao?
R: Si, (rie). Ella competía en Grupos de Edad y me lo monté para entrar juntos en meta. Fue una locura, casi me mata porque se hizo muy viral y le daba mucha vergüenza. Pero no se lo tomó mal y rápidamente me dijo que sí.
P: ¿Nos vemos en Paris en 2024?
R: Espero que sí, lo voy a luchar hasta el último día, pero creo que sí. Voy a intentarlo. Sería la mejor manera para terminar mi carrera deportiva de alto rendimiento tras 37 años.