La organización de la Volvo Ocean Race -Vuelta al mundo por etapas- va a desarrollar, en la próxima edición que partirá del puerto de Alicante en octubre de 2017, una de las operaciones logísticas más importantes de la historia en un evento náutico al instalar las bases de los equipos en cada uno de los puertos que acogerán las etapas del evento.La organización proporcionará las bases y las instalaciones de grandes dimensiones del Boatyard (Astillero de Mantenimiento), donde se llevan a cabo las reparaciones a la vista del público.
En esta edición ambas instalaciones están abiertas al público y configurarán un 'pit lane' donde los visitantes podrán ver lo que antes se hacía 'a puerta cerrada' e interactuar con las tripulaciones en un ambiente informal.
"Estamos intentando acercar a los aficionados a los espacios donde hacemos nuestras vidas para que puedan sentir lo que sucede en ellos realmente", ha señalado en neozelandés Richard Mason, director de Operaciones y veterano de la Volvo Ocean Race en cuatro ocasiones.
Esta solución reducirá los costes y las complejidades operacionales para los equipos - las nuevas bases de los equipos serán montadas y desmontadas por la organización- permitiendo a los equipos tener mas tiempo para concentrarse en la competición en el agua.
Mason considera que: "El contacto cara a cara con los héroes es clave. Recuerdo cuando era un niño y la regata visitó Auckland, mi ciudad natal, fui a reunirme con Sir Peter Blake, quien me levantó hasta la caña de su barco, el 'Ceramco'. Yo comprendí al instante que eso era lo que quería hacer con mi vida".
Las nuevas bases estarán abiertas al público en su planta baja. Allí, los equipos trabajarán día a día hasta estar listos para la siguiente etapa y habrá un espacio adicional para una activación más personal del patrocinio que complemente la activación de operaciones a gran escala de los patrocinadores sobre el terreno con pabellones hechos a medida para la exposición de producto y el 'hospitality'.
El eficiente diseño de las bases contempla que se desmontaran más fácilmente en los contenedores de envío, ahorrando un tiempo y un espacio muy valiosos mientras el evento viaja alrededor del globo.
Quérine van Osch, manager del Volvo Ocean Race Village Experience, ha afirmado que: ""Siempre tenemos el objetivo de innovar en todo lo que hacemos, y esta solución es asombrosa. El contenedor en realidad se convierte en parte de la estructura,con lo que es súper eficiente, y reduce el números de contenedores que tenemos que enviar alrededor del planeta hasta en un 60%".