Panichelli fue elegido el Jugador Hyundai del partido entre el Mirandés y el Cartagena por su completa actuación. El delantero del cuadro rojillo demostró un gran olfato goleador tras anotar dos de los tres tantos de su equipo, que sirvieron para certificar tres puntos de oro.
Por sus gles y por su gran aportación ofensiva, ElDesmarque le otorga a Panichelli el galardón a Jugador Hyundai del partido.
El Mirandés venció al Cartagena 3-1 en su vuelta a Anduva y recupera la sonrisa en un partido que dominó y tras el cual, gracias a la eficiencia goleadora del equipo y el trabajo tanto en ataque como en defensa, retorna provisionalmente al segundo puesto de la tabla. El doblete de Panichelli y el tanto de Izera dejaron el partido prácticamente sentenciado a pesar de que Aguirregabiria recortó distancias.
El Mirandés empezó comandando, olvidando el mal partido del equipo el martes en Oviedo, ante un Cartagena que salió con un planteamiento muy defensivo aunque de poco sirvió porque la efectividad del conjunto local salió a relucir a los pocos minutos. Tan solo tardó 10 minutos en ponerse por delante en el marcador el conjunto de Alessio Lisci -que hoy vio el partido desde la grada-, tras una asistencia de Juan Gutiérrez al centro del área y que Izeta mandó al fondo de la red.
Cuñat salvó a su equipo del segundo casi instantáneo, parando otro disparo de Izeta en un momento del encuentro en el que el Mirandés se vino arriba y el Cartagena se hundió un poco más. Antes de la media hora, el Mirandés acrecentó su estado de gracias, en este caso fue en una contra, con Gorrotxategi que mandó un balón a Panichelli, quién tuvo la paciencia de esperar a que Cuñat fuera al suelo para disparar y marcar el segundo.
Con el 2-0 en el marcador, el Mirandés atrasó sus líneas y se pudo ver mejor al Cartagena, aunque no cómodo. Gastón en el 41 pudo recortar distancias pero hasta en tres ocasiones se encontró con Raúl Fernández, quién ha dado muchos puntos a los jabatos en lo que va de temporada.
Tras el descanso, las fuerzas se igualaron con dos equipos que no se echaron atrás y buscaban seguir sumando tantos, pero la lesión de Musto cambió el ritmo del partido, pues justo cuando los cambios iban a llegar en el Cartagena para buscar un equipo más ofensivo llegó el tercero del Mirandés.
Fue en un centro sin peligro que se le fue largo a Jairo, el balón llegó a los pies de Hugo Rincón quién se la cedió a Panichelli que batió a Cuñat con un disparo raso pegado al palo. Cuando parecía el partido cerrado, Aguirregabiria sacó un disparo lejano que puso el 3-1 y la emoción al partido, pues el Mirandés se relajó en exceso, fruto del cansancio y se vio al Cartagena con más peligro, pero escaso para poder remontar el resultado ante un equipo muy trabajado en defensa que no vio peligrar la victoria en ningún momento y les permite sumar tres puntos.