De la hierba a los ‘despachos’: radiografía de un título con final feliz

El jueves 30 de abril era un día importante en el rugby español. Los despachos, escenarios ahora desdibujados por el protagonismo de las videoconferencias, decretarían el futuro a corto plazo de un deporte que presume de revolcarse por la hierba, por el barro, siempre bajo un estricto código de conducta que coloca al oval en un pedestal diferente al de otras pelotas.

La resolución de la Comisión Delegada de la FER, anunciada bien entrada la noche, dio origen a un terremoto con epicentro en La Cartuja, hogar de las ‘Cocodrilas’. Esta es una historia de lucha narrada por Mariola Rus, presidenta del Universitario de Sevilla.

Jueves 30 de abril

“Nosotras estábamos expectantes. Pensábamos que ese día nos iban a proclamar campeonas. Ya habíamos dicho públicamente que no sé podía jugar al rugby de aquí al 5 de julio -la fecha prevista para volver como muy tarde-, por lo que pensábamos que podría ser un día importante. La reunión empieza a las 16.00 de la tarde y pasan las horas y no sabemos nada. Es verdad que esa Comisión Delegada tenía que tomar muchas decisiones, no sólo en clave femenina. Tuvimos paciencia y más tarde de la medianoche sale el comunicado”, arranca.

Y empieza a leer: “Masculino… Campeón el VRAC, no le doy importancia y sigo leyendo”. Es aquí cuando la expectación muta por primera vez. “Lo tuve que hacer tres veces, no me lo podía creer. Ni me enfado, me produjo tristeza, no daba crédito a la disparidad de criterios. Después de 30 años como jugadora, entrenadora, presidenta, federativa… llevaba mucho trabajo encima para sentir esto de nuevo. Estuvimos hasta las 02.00 de la madrugada con llamadas, grupos de WhatsApp, teníamos claro que queríamos hacer algo, pero no desde la rabia, sino desde la elegancia. Me voy a la cama y duermo bien, pero a las 07.00 no podía con mi alma, no me satisfacía ninguna explicación y desde esa hora ya estábamos trabajando”.

Viernes 1 de mayo

Toda una metáfora para el Día Internacional del Trabajador. Ya, desde bien temprano, toma una decisión: “Yo no quería atacar a mi propio organismo. Quise hablar con Alfonso Feijoo -presidente de la Federación Española de Rugby- antes de nada y preguntarle el motivo de la decisión, porque él había estado en esa Comisión Delegada. Las elecciones están cerca y pongo mi cargo a su disposición por si podía ser un incordio para la FER o para él, pero no acepta la dimisión; me dice que quiere mujeres trabajadoras y luchadoras como yo. Feijoo dice que entiende mi desánimo y que va a aceptar cualquier tipo de sugerencia”.

La historia poco a poco adquiere relevancia y atrae el interés de la prensa, “tengo seis medios de comunicación esperando, hago un comunicado rápido a esos medios y empiezo a hablar de que no me gustaba la decisión teniendo en cuenta la salud. Yo iba a ir con toda mi fuerza a intentar que eso cambiase”.

A las 15.39 sale el comunicado oficial del club escrito y firmado por la presidenta, Mariola Rus. Es contundente; habla de una decisión arbitraria e injusta, aunque el adjetivo que más llama la atención es “discriminatoria”. La sombra de la desigualdad de género genera más repercusión. “A veces la prensa hace esas cosas para llamar la atención. Es totalmente falso, algo muy importante y que no creo que sea necesario utilizarlo en este tipo de casos. Me refería a discriminación en el criterio de igualdad entre las ligas, nos sentimos discriminadas porque sentimos que no le dan a la nuestra la misma importancia que a la masculina: con muchos más años, más equipos y que había presionado a la federación para no jugar”, explica.

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Esa idea abandona lo estrictamente deportivo y llega a las instituciones. “Me llama Javier Imbroda -consejero de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía- para interesarse sobre el tema, pero yo le hago hincapié en que nosotras en ningún momento hemos decidido llevar el tema por la desigualdad de género”, subraya. Según ha podido conocer ElDesmarque, ese mismo día Javier Imbroda se pone en contacto con José María Arrabal, secretario general de Deportes, para intentar mediar en el conflicto, ya que entiende que hay un agravio comparativo. Es Arrabal quien, según fuentes de la Consejería, se pone en contacto con la federación regional de Andalucía y la española para tender puentes en el intento de lograr una rectificación.

El viernes es un día largo y las redes sociales, como telón de fondo en este tipo de conflictos, cobran vida propia. En el centro del debate se señala a una persona en particular, vinculada al Sanse Rugby y con voto en la Comisión, como principal artífice de una estrategia partidista que define todo el caos. El equipo madrileño, para más ‘sospechas’, era el rival de las ‘Cocos’ en las semifinales del play off tras quedar cuartas en Liga Regular.

Aquí Mariola Rus es tajante: “Tengo amistad con María Ribera, desde el primer momento ella me expresa todos sus sentimientos y todas sus decisiones. Nos escribimos todos los días menos el viernes, que yo estaba más calentita y le dije, ‘María, 24 horas para respirar’. Es una mujer de rugby, compañera de selección, una mujer que ha hecho mucho por este deporte. Aquí no hubo mala intención, hubo mala información. La información que le llega a esa Comisión Delegada es errónea, se pensaba que todos queríamos jugar y se vota en consecuencia. Yo claro que quería jugar esa semifinal histórica en casa, pero hace un mes que veía que no se podía y lo repetí hace una semana”. Y reitera: “Entiendo que no hubo mala intención, sí una mala información”.

👏 Enhorabuena @RugbyfemSevilla por la obtención del título de @DHIberdrola tras la decisión de @ferugby de dar por finalizada la #LigaIberdrolaRugby

Felicitar tambien a @eibarugbytaldea por su ascenso, será un duro rival el año próximo#sanse #rugby @acdssreyes @sansecomunica

— Sanse Scrum Rugby (@SanseRugby) May 3, 2020

De hecho, las críticas se intensifican, lo que obliga al club madrileño a sacar un comunicado desmintiendo tener un interés particular. Es así, con publicaciones en Twitter, la que parece la única forma de conocer la posición del resto de clubes implicados. “El viernes no llegamos a conocer la postura de todos los equipos, los de play off sí, pero del resto me cuesta trabajo”.

Sábado 2 de mayo

“Reúno a todos los equipos en un grupo de WhatsApp y empezamos a hablar. Me sorprendió que todos estábamos de acuerdo en pedir una nueva reunión de la Comisión Delegada. Un equipo dice que no está de acuerdo con la decisión pero que ya piensa en la temporada que viene y no haría nada, ni correo ni nada, decide descolgarse; y otro, no digo nombres, dice que quería seguir jugando a costa de lo que fuera. Los otros seis no queremos jugar y la decisión es clara: parar la temporada y proclamar campeón al primer clasificado de la Liga Regular, nosotras. Lo mismo pasa con la División B y Eibar”, desglosa.

Mientras que la categoría masculina sí cuenta con una Asociación que defiende sus intereses en grupo, este contexto, nuevo, construye los cimientos de su versión femenina. “Date cuenta de que nosotros somos noveles y este tipo de circunstancias nacen según surgen las necesidades. Una cosa positiva que hemos sacado con esto es la unión, yo no conocía al presidente de INEF y ahora hablamos todos los días. Veía que la única forma de conseguir el objetivo era unirnos. Está claro que igual ha llegado la hora de organizarnos, porque cuando lo hacemos tenemos poder”, cuenta, mientras se le escapa una sonrisa, otra más.

-¿El sábado ya sabéis que se van a volver a reunir?

-No sabemos nada, aunque yo lo percibo por lo que voy viendo y la información que me piden. Y ya el domingo sí sabemos, así por ‘cositas’, que sí, que se van a reunir.

Domingo 3 de mayo

“Y cuando se reúnen, yo me relajo. No es que me dé igual, aunque el título era secundario, pero es la alegría de haber conseguido el objetivo. Ya sabía que no se iba a volver atrás, cada club envió a la federación su postura, y no sólo ellos: también jugadoras o federaciones regionales. Si sale igual, pues bueno, hemos luchado y punto… Pero la verdad que fuimos optimistas, como casi siempre, porque creo que voy a ganar todos los partidos”, destaca.

La resolución, la buena, salió a las 21.14, pero media hora antes ya rulaban los mensajes de felicitación. A Mariola Rus el desenlace le pilló en mitad del paseo, sin móvil: “Estaba tan relajada que me enteré la última. Salí a pasear a las 20.00 con mis hijas, era el primer día que podíamos salir y me fui sin móvil. Y cuando llego a casa… te puedes imaginar: ¡Qué somos campeonas!”.

El primer título de División de Honor femenina de un equipo de Andalucía. Historia para una "familia" en su segunda temporada en la máxima categoría. Una gesta “agridulce” por el panorama, pero que permite salir al balcón y sentir una bocanada de aire fresco. Muchos aplausos fueron también para ellas. Antes de verse las caras, había que cumplir con un último trabajo.

“Lo primero que hicimos, como somos muy trabajadoras, fue reunirnos la comisión de comunicación para elaborar un comunicado expresando gratitud, agradecimiento y alabando lo que se había hecho en consecuencia a todo lo que habíamos pasado. Estuvimos un rato largo, sobre todo ellas, porque yo recibía más llamadas. Luego ‘hicimos un zoom’ con una cerveza en la mano, muy cutre, pero bueno… Me encantó. Cuando nos dejen celebrarlo y abrazarnos, que es lo que tenemos ganas, nos iremos a celebrarlo como Dios manda”, concluye, cerrando el telón con una carcajada final. Enhorabuena, ‘Cocodrilas’, sois campeonas de España.

📣🗒️COMUNICADO OFICIAL ante los acuerdos tomados por la Comisión Delegada de la @ferugby celebrada hoy. Agradecer la recapacitación de la FER. Lo que importa es la salud de las jugadoras.
Enhorabuena a @eibarugbytaldea por el ascenso. Pronto nos reencontraremos, @chamirugbyfem. pic.twitter.com/K2LaXH3jU4

— COCODRILAS RUGBY (@CocodrilasRugby) May 3, 2020