Los amistosos, una 'ganga' desperdiciada en el Betis

Empieza a ser costumbre en el Betis que los amistosos se conviertan en fuente de dudas. Si hace poco más de un mes el conjunto verdiblanco salía bastante perjudicado del Príncipe Felipe de Cáceres, en Jaén se confirmó que este tipo de encuentros no están haciendo todo el bien esperado.

Son compromisos sin importancia en realidad, dado que se trata de mantener la actividad durante los parones ligueros. Sin embargo, la conclusión que se extrae es que hay una serie de futbolistas que desaprovechan una y otra vez oportunidades para reivindicarse y ganarse la confianza de Pepe Mel. El técnico ya acabó muy enfadado tras la derrota a manos del Cacereño e incluso criticó públicamente la actitud de los menos habituales.
Tras perder en tierras extremeñas, el Betis ganó pero tampoco convenció en Coria del Río y esto obligó a los heliopolitanos a tomarse muy en serio el tercer amistoso que tenía concretado, y lo cierto es que el grupo mejoró su imagen ante el Benfica en Portimao.
Esta vez, con el equipo situado cuarto en la Liga pese a que su juego no persuade a la afición, ocurrió lo que muchos béticos temían, que el Trofeo del Olivo acabó convirtiéndose en un examen suspenso. Y es que hay hombres como Amaya, Dorado, Salva Sevilla o Pereira, entre otros, que están obligados a aprovechar estos minutos si quieren dificultar las decisiones del técnico madrileño.