El Open de Australia ha dejado una de las imágenes de la semana cuando el foco se centra en Rafa Nadal y en concreto en sus excentricidades, que hasta los recogepelotas conocen y asumen antes de que lo pueda hacer el tenista mallorquín.
En mitad del partido el recogepelotas observó cómo una de las dos botellas que tenía Rafa Nadal en su asiento se caían y paró el partido exclusivamente para acercarse a levantarlas alineadas.
Sin duda es una de las manías más famosas de Rafa Nadal, que al comprobar lo que hizo el joven, no pudo evitar la sonrisa justo antes de evitar un saque. Sin duda, una sonrisa de un grande que es consciente de que tiene todos los ojos en él.