Verdasco dice que sus malas sensaciones hicieron que Kokkinakis se creciera

El tenista español Fernando Verdasco lamentó este lunes que sus malas sensaciones durante el inicio del partido ante Thanasi Kokkinakis hicieran que el australiano se creciera, aunque se mostró satisfecho de haber ganado y logrado el pase a octavos en Miami."En los primeros juegos le vi con falta de chispa y luego al ver que yo estaba con malas sensaciones (...) le hice mejor de lo que es y le hice soltarse más en el juego", explicó a la prensa a la conclusión de su partido, que ganó por 3-6, 6-4 y 7-6(4).
Aseguró el madrileño que se trató de un "partido muy duro mentalmente", pues se vio "luchando contra todo, el sol, no sentir muy bien la bola en bastantes momentos del partido y ver que Kokkinakis estaba jugando bien", a lo que debió sumar que él cometió "fallos muy, muy tontos".
En su opinión, el australiano es "muy difícil" de batir, pues posee un "muy buen saque" y este lunes, casi siempre que iba abajo en el marcador con su saque, consiguió muchos primeros servicios y, además, "cerca de las líneas".
Indicó que una vez que había perdido el primer set, intentó sacar de "dentro toda la energía, la fuerza" necesaria para afrontar esos momentos en los que el partido estaba complicado, especialmente cuando hacía puntos "perfectos o casi", y aun así se le escapaban. "Eso, mentalmente, es complicado de seguir positivo, recalcó.
Uno de esos momentos delicados fue cuando en el "tie-break" se vio 0-3, tras sufrir dos "mini-break". Fue entonces cuando pensó en "intentar aguantar" e ir punto a punto, y a partir de que logró empatar, indicó, jugó "bastante bien" hasta ganar 7-4, gracias, en buena medida, a su servicio.
Sobre su compatriota Pablo Carreño, su rival en octavos, explicó que tienen buena relación personal y que han entrenado juntos y jugaron además juntos el dobles en torneos como el Abierto de EE.UU.
Del gijonés dijo que es un tenista "sólido", que el año pasado lo "hizo increíble", por lo que espera que no sea "tan duro" como ante Kokkinakis y su juego sea "más estable de principio a fin del partido".