El suizo Roger Federer, que regresó este jueves a competir en el Masters 1000 de Roma, tras dos años ausente, dijo sobre su triunfo ante el portugués Joao Sousa que tuvo "buenas sensaciones", y se mostró satisfecho por no sufrir roturas de saque.
"Cada campo en tierra es distinto. Mónaco, Madrid, Barcelona, París, aquí. Empecé bien, con buenas sensaciones. No perdí el saque. Esto en tierra y en una primera ronda es una buena señal", afirmó Federer al acabar su partido.
El suizo, cuatro veces finalista en Roma y campeón este año en Dubai y Miami, jugará los octavos de final este mismo jueves, en la sesión de tarde-noche, contra el croata Borna Coric, después de que todo el programa del miércoles se aplazara por lluvia.
"Prepararé el partido como siempre se hace cuando juegas dos rondas en un día. Terminas el partido, te duchas, comes algo, te relajas y te preparas para el otro. Lo bueno es que el primer partido no ha sido muy físico", dijo.
"Me dio un poco de informaciones. Creo que las condiciones del campo serán parecidas. Lo interesante es que yo jugué hoy, y él no. ¿Es una ventaja? ¿Una desventaja? No sé. Borna es un rival duro. Perdí con él un par de veces el año pasado", agregó.