El argentino Guido Pella reconoció, después de eliminar al sudafricano Kevin Anderson en la pista central de Wimbledon, que ni si hubiera llegado la Reina de Inglaterra se hubiera desconcentrado.
"Fue uno de los pocos partidos en el año en el que estuve 100 % concentrado. Podría haber venido la Reina de Inglterra y yo iba a seguir concentrado en el partido", explicó el argentino en rueda de prensa.
Pella, que el año pasado eliminó en segunda ronda al croata Marin Cilic, que venía de hacer final, confirmó su buen hacer en pasto con el triunfo en tres parciales ante Anderson, finalista en 2018.
"Mi carrera desde que fui júnior nunca fue normal. Estar por primera vez en octavos de Grand Slam en Wimbledon, una superficie en la que nunca jugué en mi vida, ningún argentino juega y solo jugamos un mes al año, es algo espectacular que no cambio por nada", asimiló.
"Es una superficie que más que venir de paseo puedo ganar buenos partidos", agregó.
El tenista sopesó que lo que cambió su año fue el triunfo en el torneo de Sao Paulo sobre tierra batida hace unos meses.
"Si el torneo de Sao Paulo no se hubiera dado, no estaría aquí. Estaba seguro de que necesitaba ganarlo, me daba igual el sitio y la superficie. Fue algo muy bueno para mi mente", expuso.
Respecto a la táctica del partido y la que tendrá que usar en octavos de final, ante el también sacador Milos Raonic, Pella incidió en la importancia de intentar restar cuantos más servicios mejor, aunque no entren.
"Acasuso -su entrenador- está mucho en los detalles y habíamos hablado mucho de que es un jugador muy peligroso cuando toma la iniciativa. Mi idea era que tenía que devolverle la mayor cantidad de saques posibles. No importaba si no entraban, que él sintiera que iba a poner la raqueta en todos los saques y que eso, a la larga, le iba a generar una presión", reflexionó.
Pella volverá a la competición este lunes, por primera vez metido en la segunda semana de un Grand Slam.