Carlos Alcaraz ha vuelto a demostrar por qué nunca debió dejar el trono. El español aterrizó en Miami dispuesto a revalidar el título, aquél que consiguió con tan solo 18 años y que supuso su primer Master 1000 de su carrera. Y poco a poco se va acercando a volver a levantar el trofeo con el que escribió un capítulo de la historia del tenis. Y es que hace un año se convirtió en el primer español en ganar en Miami y por el que gasta el Rey le llamó para felicitiarle.
Carlos ya está en octavos tras ganar al croata Dusan Lajovic con un resultado de 6/0 7/6 y dejando verdaderos puntazos, como puedes ver en el vídeo que encabeza la noticia, que demuestran por qué, a día de hoy, es el tenista más respetado del circuito. Hasta Medvedev se rindió ante él cuando perdió la final de Indian Wells la semana pasada.
Ya dejó atrás la lesión que le apartó de disputar el primer Grand Slam de la temporada. Una baja que se produjo en un entrenamiento a principios de enero y a diez días del Open de Australia. Pero, esa pierna derecha parece que ya está al cien por cien por cómo se mueve en cada partido. Y es que Alcaraz vuela sobre la pista y todo tiene que ver porque se encuentra mucho más rápido.
Una de las cualidades del actual número uno es la rapidez de piernas. Muchos son los rivales que, cuando parecía que tenían el punto ganado, se desesperan al ver que Alcaraz siempre devuelve la bola. Y no es solo eso, sino que acaba levantando el puño tras conseguir que una buena defensa se convierta en un gran ataque. Da igual en qué zona de la pista se encuentre, para él eso no importa.
Una velocidad y una capacidad de recuperación en cada golpe que le ayuda a ser uno de los jugadores más peligrosos del circuito.
"Estoy más rápido. Me siento rápido. me muevo bien, sin pensar en la lesión. Para mí esta es la parte más importante. Estoy disfrutando mucho, ¿sabes?", dice Alcaraz al terminar el partido.
"También con la variedad con la que estoy jugando. Muchos golpes. Honestamente, estoy disfrutando cada segundo", añadió el de El Palmar.
El último en sufrirlo fue Lajovic. El croata no tuvo ninguna opción en el primer set donde Carlos se impuso con un 6/0. Aunque la segunda manga se fue al tie-break, Alcaraz seguía en pista como si se estuviera disputan el primer punto del partido. Una rapidez de pierna vertiginosa que hasta el propio Jimmy Butler se rindió ante él.
Al final, el murciano se impuso por un 6/0 y 7/6 ante el croata y ya está en octavos de final de Miami. El próximo rival será el estadounidense Tommy Paul, cabeza número 16 del torneo, y que se disputará el martes 28 de marzo.