Abandona el partido tras sufrir un ataque de ansiedad: su rival y el público se rieron de ella

Lo ocurrido en el partido entre Shuai Zheng y Kiara Toth ha sido uno de los momentos más tristes del año en el mundo del tenis. La tenista china se retiró del partido tras sufrir un ataque de ansiedad. La jugadora se echó a llorar por una dudosa bola que aparentemente había caído dentro, pero se la dieron mala. Se puso muy nerviosa, y parte del público y su rival no ayudaron, sino todo lo contrario. Se rieron de ella e incluso la provocaron.

El momento se ha hecho viral y muchos usuarios han querido pedir a la WTA que ponga manos en el asunto. Además, los aficionados han señalado a Toth como la culpable de lo ocurrido en el partido.

El ataque de ansiedad de Zheng

En el primer set, con 5 – 5, 15 – 15, Zheng manda una bola a la línea lateral. La bola, tras varios segundos de dudas, es cantada mala. La jueza bajó de la silla para revisar la marca, y a pesar de que la marca estaba sobre la línea, la cantó fuera. En ese momento Zheng no entiende nada y es cuando empieza el nerviosismo y pide la asistencia del supervisor del campo, algo que nunca ocurrió.

La discusión se prolongó entre la jueza y la jugadora. Una decía que estaba dentro y la otra decía que estaba fuera. Pero Zheng, en ese momento, estaba muy nerviosa. Cuando quiso volverle a decir algo a la jueza, alguien le gritó desde el público, algo que enervó más a la china. Preguntó “¿Quién es?”, refiriéndose a quién lo había dicho. Esto provocó las risas de su rival, algo que avivó más la irritación de la china.

El juego se puso 30 – 30. Fue entonces cuando Toth, presuponemos que para poner más nerviosa a su rival, fue directa a la marca de la bola. “¡Espera, espera! ¡Deja la marca!”, dijo Zheng. Toth hizo oídos sordos y la borró igualmente. Esto ya desestabilizó por completo a la de Tianjín. “¿Por qué has hecho eso?”, preguntó con la voz rota. El partido se puso 6 – 5 para Toth y en el cambio de campo, Zheng llamó al fisio y se retiró entre lágrimas.

La bola, había entrado.