Carlos Alcaraz está pisando fuerte en Pekín. Su objetivo a corto plazo es levantar el título del Abierto de la capital de China y estrechar el cerco con Djokovic. Este lunes tiene los cuartos de final ante Ruud. Sin embargo, hay algo que le ronda la cabeza más allá de su calendario más cercano. Más que un objetivo es un sueño. Y no depende exclusivamente de él. Es jugar los dobles de los Juegos Olímpicos de París 2024 junto a Rafa Nadal.
“Ahora mismo Rafa está sufriendo mucho. Espero que pueda volver a entrenar y que pueda jugar el año que viene desde el principio, que tengamos un Rafa sano, preparado para los Juegos", han sido las primeras declaraciones del murciano a China Open Press. Alcaraz vivirá su primera cita olímpica en la capital gala y no concibe mejor forma de estrenarse que, en dobles, con su ídolo.
"Obviamente sería un sueño para mí jugar dobles con él en París. Depende de los dos. Quedan muchos meses para París, pueden pasar muchas cosas. Tengo que estar sano, trabajar duro y estar preparado para este torneo. Veremos qué pasa, pero está claro que sería un sueño", ha reconocido sobre una posibilidad que, por el momento, está puesta sobre la mesa.
La ilusión de Alcaraz es una realidad, al mismo tiempo que es una incógnita cuáles son las intenciones de Rafa Nadal con respecto a su futuro. Lleva fuera de las pistas desde enero y tiene marcado en rojo volver para el Abierto de Australia de principios de 2024. Más allá de eso, todos son suposiciones. El manacorí podría coronar su carrera con otro oro olímpico. Y en las mismas pistas donde es una leyenda de Roland Garros.
En 2008, cuando Alcaraz tenía cinco años, el balear logró la medalla de oro en individuales en los Juegos Olímpicos de Pekín. Ocho años más tarde, en Río 2016, logró una nueva medalla de oro. Aquella vez fue en dobles, junto a Marc López. Una hazaña que sueña con repetir Alcaraz en París.