Aryna Sabalenka reaparecía este viernes sobre las pistas de tenis después del fallecimiento de su expareja, el exjugador de la NHL Konstantin Koltsov. El ex deportista bielorruso perdía la vida el pasado lunes tras precipitarse por el balcón de un hotel en Miami. La tenista número 2 en el ranking WTA se enfrentaba a su mejor amiga, Paula Badosa, en la segunda ronda del Open de Miami y tras el encuentro se vio una imagen conmovedora.
Sabalenka venció en dos sets a la atleta española, 6-4 y 6-3, y al finalizar el partido ambas se fundieron en un emotivo abrazo que representa muy bien los sentimientos vividos en los últimos días en torno a Aryna.
Aryna Sabalenka & Paula Badosa share a nice exchange at the net ❤
BFF goals. pic.twitter.com/Mmrs0c53iB
— The Tennis Letter (@TheTennisLetter) March 22, 2024
“Ella es una mujer fuerte, con una personalidad fuerte. Le dije que le deseo lo mejor. Veremos si puede llegar lejos en este torneo”, pronunció Paula Baodsa en declaraciones posteriores al choque.
Un día antes del choque, Aryna Sabalenka explicó en redes sociales que ella y Koltsov ya no eran pareja. Aun así, la tenista estaba viviendo momentos tremendamente duros. “La muerte de Konstantin es una tragedia impensable, y, aunque ya no estábamos juntos, mi corazón está roto”, se leía en las stories de Instagram de la tenista bielorrusa. “Pido por favor que se respete mi privacidad y la de su familia durante este momento difícil”, finalizaba el escrito.
Durante estos días, también ha hablado la exmujer del difunto, Yulia Mikhailova. En declaraciones al medio bielorruso Zerkalo detalló que, “probablemente, Konstantin estaba muy borracho” en el momento de los hechos y descartó la hipótesis barajada por la policía de que se tratase de un suicidio.
“En la habitación donde se alojaba se encontraron botellas de alcohol vacías. Había un balcón con vistas al océano. Probablemente, Konstantin no era consciente de sus acciones”, explica Mikhailova.
“En este momento es imposible decir con seguridad si fue un suicidio o un accidente”, explica la exmujer del fallecido, que se inclina por el segundo escenario ya que “él no tenía intención de morir”.
“Creo que sus colegas lo malinterpretaron o hicieron pasar por un hecho la suposición de la policía sobre el suicidio”, apuntaba la propia declarante.