Oriente Medio sigue avanzando en su plan de meterse de lleno en el mundo del tenis. Poco más de un mes después de que el fondo soberano de Arabia Saudí (PIF) llegase a un acuerdo con la ATP, se ha echo efectivo la asociación con el tenis femenino para ser la sede de las WTA Finals durante las tres próximas ediciones, es decir, de este 2024 hasta 2026 incluido.
Un campeonato en el que compiten las ocho mejores tenistas del ranking para proclamarse como la mejor de la WTA, un reclame turístico y económico para los fanáticos del tenis y del que se han beneficiado varios países desde su creación.
Tras las cuatro finales disputadas entre 2014 y 2018 en Singapur, el torneo tuvo distintas sedes: Shenzhen (China) en 2019, Guadalajara (México) en 2021, Fort Worth (Estados Unidos) en 2022 y Cancún en 2023. La pandemia de covid y el caso de Shuai Peng, desaparecida tras denunciar abusos sexuales por parte de un exdirigente del partido chino, alejaron a la WTA de China y obligaron a buscar una nueva sede permanente que ahora será Riad.
Además la organización en la pasada edición fue un auténtico desastre y eso ha sido el paso definitivo para que este jueves se haya hecho oficial el acuerdo entre ambos organismos. Lo más llamativo ha sido cuánto ha crecido los premios que se reparten entre los participantes: 15.250.000 dólares, cifras de récord que nunca se han dado en la categoría femenina. La próxima edición se disputará del 2 al 9 de noviembre.
Arabia Saudí consigue, de este modo, su primer torneo oficial después de celebrar en Yeda las Next Gen Finals en 2023. A lo largo de los años ha hospedado diferentes exhibiciones, como la que jugaron Novak Djokovic y Carlos Alcaraz el pasado diciembre o la que disputaron Ons Jabeur y Aryna Sabalenka en 2023, además del Six Kings Slams que jugarán Rafael Nadal, Alcaraz, Novak Djokovic, Holger Rune, Jannik Sinner y Daniil Medvedev en octubre.
El siguiente paso del país saudí, que a través del fondo PIF es uno de los principales inversores de la ATP, es hacerse con un Masters 1.000, que se disputaría antes del Abierto de Australia en enero.