Paula Badosa no levanta cabeza, esta vez, con el Mutua Madrid Open como su último fiasco. Después de que la semana pasada tuviera que retirarse en Stuttgart ante Sabalenka, la tenista volvió a quedar fuera de otro campeonato tras caer en la capital española ante su compatriota Jéssica Bouzas Maneiro por 2-6, 6-3 y 6-3.
Una derrota que le dejó muy tocada al salir del top-100 del ranking WTA y del que sacó la conclusión de que todo se debe a un bajo nivel provocado por las lesiones.
"Ha sido un partido complicado, ella ha jugado muy bien y yo, obviamente, no", afirmó en conferencia de prensa. Estoy decepcionada. Vengo de lo que vengo, pero esperaba más. Tampoco puedo pedir mucho", afirmó Badosa, afectada en los últimos once meses por una lesión crónica de espalda.
"Hoy me ha afectado mi nivel de tenis. Físicamente es lo que hay, pero mi nivel de tenis ha sido muy bajo. Siempre miro la parte positiva y no me queda otra que seguir entrenando y pensar en los siguientes torneos", dijo la ex número dos mundial, muy baja de ánimo.
Preguntada por si se estaba "desenamorando" del tenis, Badosa dijo que esa era la cuestión clave.
"Me gusta mucho el tenis, me encanta competir, pero no me gusta verme como estoy. Siempre he tenido expectativas muy altas, he vivido lo que es estar lo más arriba y ahora es muy difícil verme abajo", indicó.
"Cada semana hay una decepción, hoy por el nivel de tenis", dijo. "Me está costando levantarme. El nivel del tenis está, pero tengo que recuperarme bastante emocionalmente".
Los problemas físicos de Paula Badosa están siendo un calvario en su carrera en estos últimos meses. Frustrada por el abandono de cada competición y lastrada físicamente, su nivel ha caído en picado para poder competir entre las mejores del mundo.
Eso ha hecho que este nuevo palo le deja más preguntas que respuestas de si puede seguir compitiendo a nivel profesional, pero ella ya ha dejado claro muchas veces que no piensa rendirse para seguir haciendo lo que más le gusta. La siguiente parada es el Open de Roma que arrancará en mayo, tiempo suficiente para despejar su mente y centrarse en seguir caminando hacia su mejor versión.