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Mery Perelló y Maribel Nadal rompen a llorar en el homenaje a Rafa: orgullo y admiración

Vallecano y periodista deportivo. No hay más.

España llora el adiós de Rafa Nadal. El tenista cayó en el Mutua Madrid Open ante el checo Jiri Lehecka (5-7/4-6) y se llevó el homenaje de toda la Caja Mágica. Un momento emocionante con la música de 'Gladiator' que provocó las lágrimas de los presentes, entre los que destacó Diego Pablo Simeone.

El técnico del Atlético de Madrid, que se perdió las semifinales de Champions League entre el Bayern de Múnich y el Real Madrid, rompió a llorar en la despedida del de Manacor. Un gesto aplaudido en redes pese a la rivalidad existente entre los dos mejores equipos de la Comunidad de Madrid. Pero no fue el único.

Simeone emocionado con el final de Rafa Nadal (rtve)

La familia de Rafa Nadal rompe a llorar en su despedida

Feliciano López y Gerard Tsobanian entraron a la Caja Mágica para entregarle un trofeo especial a Rafa Nadal mientras un homenaje se producía en las gradas. Cuatro lonas, una por cada letra de RAFA, se deslizaban por las gradas mientras toda la afición aplaudía al tenista español.

Un momento especial en el que dos personas no aguantaron las lágrimas. Las cámaras de Eurosport captaron como Maribel Nadal, hermana del tenista, y su esposa Mery Perelló, rompieron a llorar, dejando una emocionante imagen de orgullo y admiración por el de Manacor.


"No quiero agradecer a mi familia y al equipo porque no me estoy retirando. Eso lo haré el día que me retire", dijo en un momento de su discurso, asegurando que no era el momento para decir adiós aunque aseguró que no le quedaba mucho para 'colgar las raquetas'.

El momento que emocionó a todo un país

Durante el homenaje, Rafa Nadal cogió el micrófono y se puso a hablar. Hasta que la emoción le pudo. "Lo único que puedo es dar las gracias, ha sido un viaje increíble que empezó cuando era muy pequeñito y la primera vez que vine aquí a Madrid, si no me equivoco era 2003, pero yo creo que la primera vez que llegué con...", dijo.

Nadal tuvo que tragar saliva antes de continuar su discurso, mientras en las gradas sólo sonaban aplausos de todos los aficionados. "La primera vez que llegué siendo competitivo creo que fue en 2005, fue una de las victorias más emocionantes que tuve en mi carrera, cuando aún se jugaba en la pista cubierta, perdiendo dos sets a cero; desde ahí hasta el día de hoy sólo ha sido un apoyo y un cariño incondicional por parte de todos aquí en Madrid, no hay manera de agradecerlo", dijo.

Rafa Nadal, emocionado en su homenaje en Madrid (Foto: Cordon Press).

"Soy un afortunado de la vida por todo lo que he vivido, no puedo pedir más. Espero haber sido un ejemplo para las nuevas generaciones. Es difícil, pero mi cuerpo me ha enviado señales de que este día tenía que llegar", prosiguió el tenista que tendrá su nombre grabado en el Mutua Madrid Open.

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