España debuta ante Países Bajos en el pistoletazo de salida de las finales de Copa Davis 2024 este martes, desde la 17.00 horas, con la duda de qué rol tendrá el gran protagonista, Rafa Nadal. El manacorí disfruta cada segundo que le queda como tenista profesional sin abandonar lo que le llevó la éxito: la ambición y la competitividad. Lo ha demostrado este lunes junto a Carlos Alcaraz en un entrenamiento conjunto donde han llegado a jugar un set.
En el calentamiento, cuando practicaban el saque, Nadal exigía al murciano. "Hombre, hay que apretar", le decía el veintidós veces ganador de Gran Slams al actual número tres del mundo, cuando este iba a restar. La práctica duró una hora y tuvo gran intensidad. Jugaron ocho juegos y empataron.
Todo ello con la atenta mirada del capitán del equipo español, David Ferrer, y los entrenadores de cada jugador: Juan Carlos Ferrero, pupilo de Alcaraz, y Carlos Moyá, el de Rafa. En la grada, el director de las finales de la Davis, Feliciano López. Un resumen de décadas enteras del tenis español, reunidos en el Carpena malagueño. Los testigos del partidillo, unos cien periodistas y medios gráficos acreditados.
Carlos Alcaraz será el número uno de España y Rafa Nadal apunta a jugar como segundo espada, aunque es una decisión que deberá confirmar Ferrer. Decidirá este martes y tiene hasta una hora antes del primer partido. Las sensaciones con el mito mallorquín son buenas. Rafa está fino y ha ido cogiendo ritmo en estos últimos cuatro días, más el rodaje de preparación de sus últimos dos meses y medio de entrenamientos.
Aunque el tenista español reconoció este lunes en la rueda de prensa de la Armada, previa al España-Países Bajos, que no sabe cómo puede responder "si llega a jugar algún partido" porque "lleva meses jugando muy poco en el circuito", por eso está preparando "al máximo para llegar lo mejor preparado posible".
Pero su voracidad gana a todo. Quiere despedirse dando un nivel óptimo, aunque sepa que su cuerpo, llevado al límite durante dos décadas, ya tiene un tope. Con Carlos Alcaraz ya casi recuperado al cien por cien de un resfriado y un Nadal extramotivado, España está en buenas manos, también con tres nombres de gran nivel y estado de forma como Roberto Bautista, Pedro Martínez y el doblista Marcel Granollers.