Los golpes prohibidos de Carlos Alcaraz que levantaron de la silla hasta a Nadal: stop volley, dejadas y gestos al público

Carlos Alcaraz jugó ante Tallon Griekspoor el segundo partido de individuales de la Copa Davis. El partido, disputado en el Martín Carpena de Málaga, ha sido toda una exhibición de lucha, garra... y de talento. Y es que el murciano jugó desatado, especialmente en el segundo set, en el que arrancó de manera espectacular. Y todo ante la atenta mirada de su ídolo y compañero en la selección de España: Rafa Nadal.

Lo cierto es que el partido de Carlitos tuvo de todo. El tenista decidió abrir el tarro de las esencias y dejó algunos restos y golpes de todas clases. Para muestra, el stop volley que se marcó en el Martín Carpena, dejando completamente vendido a Griekspoor y levantando de la silla al mismísimo Rafa Nadal, a quien no le quedó más remedio que levantarse y aplaudir. Ahora jugará junto a Marcel Granollers en dobles para tratar de desequilibrar la balanza en estos cuartos de final de la Copa Davis.

El stop volley de Carlos Alcaraz, al alcance de pocos tenistas

Y es que los stop volley son golpes complicadísimos en los que no hay lugar para el error. La más mínima imprecisión en el giro de muñeca te deja la pelota en tu propio campo, te la estrella contra la red o te la manda a la otra punta de la pista con el canto de la raqueta. Sin embargo, no hay miedo con Carlos Alcaraz.

Y es que su movimiento fue eficaz, preciso y efectivo. Dejó indefenso a Griekspoor, con la pelota muy pegada a la red y a una distancia a la que le fue imposible alcanzarla al neerlandés. En el vídeo insertado a continuación puedes verlo, incluso a cámara lenta, y deleitarte con la 'frivolité' de Carlos Alcaraz.

La grada del Martín Carpena y Alcaraz se vuelven uno solo

Lo cierto es que el show de Carlos Alcaraz no se acabó con este golpe. Y es que dejó un amplio abanico de dejadas y de golpes prohibidos que levantaron de sus asientos al público del Martín Carpena de Málaga. ¡Incluso levantó una ola! Aunque uno de los momentazos que ha dejado Carlos Alcaraz es el gesto llevándose el dedo al oído tras un puntazo. El propio Rafa Nadal se partía de risa con este gestito del murciano a la grada, que, además, propició una cerrada ovación del público. Todo esto por no hablar del 7-0 que se marcó en el tie-break. Sin duda, el partido ha sido toda una exhibición de tenis.