El secreto doble que esconde el potencial físico de Thierry R. Correia

Si hay alguna virtud que salta a la vista de Thierry R. Correia cuando se le ve jugar es el enorme potencial que tiene el nuevo fichaje del Valencia CF. Dos son las razones que se esconden tras esa capacidad que le hace destacar entre los de su generación.

Thierry R. Correia es el nombre de moda en el Valencia CF y en Portugal, tras firmar en la misma semana con el conjunto de Mestalla y debutar con la sub 21. Una de las principales cualidades de Thierry R. Correia es su enorme potencial físico y son numerosas las voces técnicas que así lo definen cuando son preguntados. Con cuatro partidos en el Sporting, el campeón de la Eurocopa SUb 17 y sub 19 con Portugal, esconde tras su potencial un secreto que es doble: Su genética heredada de su padre y un plan específico de trabajo.

Así, según explican los que conoce a la familia Correia en la web oficial del club, “su físico es pura genética, lo ha heredado de su padre”. Según las mencionadas fuentes "fue desarrollando cada vez más su físico privilegiado, hasta que al llegar a los 18 años se produce un cambio fundamental para rematar su formación. Fue entonces cuando los técnicos del club portugués decidieron someterlo a una preparación que perfeccionaría su físico y que le ayudaría a alcanzar el siguiente nivel".

Thierry R. Correia y la generación del 99

El lateral venía de mostrar sus primeros fogonazos con la generación del ’99, una de las más brillantes que ha dado Portugal en los últimos años que ha ganado Eurocopa sub 17 y sub 19. En ese momento el Sporting CP le diseñó un programa de entrenamientos específicos en el gimnasio con el objetivo de “prepararlo para ganar más duelos” con vistas a un aterrizaje en la élite que se ha producido en Lisboa y ahora debe continuar en Mestalla. Los técnicos lo consideran "un jugador equilibrado y preparado para batirse en duelos tierra-aire con los rivales desde el primer día. Quizá por eso, nada más llegar a Mestalla le informaban de la exigencia física del método de Marcelino. “No será un problema”, confirmaba.