Mestalla le enseña el camino correcto a la Grada Joven

El Valencia-Alavés de este domingo era crucial para los intereses, una final por la cuarta plaza. Era necesario generar el mejor ambiente posible en Mestalla para ayudar a los de Marcelino García Toral a sumar los tres puntos y así se hizo.

Después de los roces que se vivieron con la Curva Nord en el partido ante el Arsenal, era una incógnita saber cómo reaccionaría el estadio. A pesar de un inicio algo tenso, se impuso la lógica y se generó un ambiente propicio para ganar esta 'final' por la Champions. Si bien es cierto, la mayoría de aficionados, recriminaron a la Grada Joven cuando se encaró con el palco o cuando hizo cánticos reivindicativos.

Inicio con enfrentamiento

Los minutos iniciales estuvieron marcados por la tensión que se vivió en la grada. Todavía sin solucionar las cuentas que quedaron pendientes del partido ante el Arsenal, la división entre distintos sectores de la afición fue evidentes

Primero, la mayor parte del campo inició un cántico sin que la Curva Nord se sumara. Segundos después, la Curva inició su propio cántico para animar al equipo, mientras que el resto de la grada comenzó a pitarles. Afortunadamente, ese roce inicial no tuvo continuidad y todo el campo comenzó a animar unida.

Paces momentáneas por el bien del equipo

La importancia del encuentro provocó que se enterrara el hacha de guerra y la afición hiciera las paces con la Curva Nord. Así, Mestalla comenzó a animar con una sola voz, generando un ambiente que apoyó al equipo en los momentos más difíciles.

Y es que los cantos de ánimo no aflojaron ni siquiera después de que el Alavés se adelantara en el marcador. Mestalla redobló esfuerzos y alentó a su equipo para que le diera la vuelta al resultado. El ambiente fue creciendo hasta convertirse en una fiesta tras el pitido final y se despidió a los jugadores al grito de "Valencia, Valencia".

Al final, intercambio de pitidos

Tras el encuentro, la plantilla realizó la vuelta de honor a Mestalla y una parte del estadio pitó cuando los jugadores se aproximaron a la zona de la Curva Nord. Además, también se pitaron los cánticos de la Curva contra Anil Murthy.

Es más, al final del partido, la Curva trató de nuevo de encararse hacia el palco o mostrar su situación y la afición les silenció con una sonora pitada. El respetable, antes de irse, le enseñó a la Grada Joven lo que desea de ella.

Pendientes del Barça

En Mestalla no sólo se cantaron los goles del Valencia CF contra el Deportivo Alavés, sino que el estadio también estuvo muy pendiente de lo que sucedía en el Camp Nou entre el FC Barcelona y el Getafe CF. El conjunto valencianista necesitaba un tropiezo de los azulones en la Ciudad Condal, por lo que Mestalla también cantaron los goles de los azulgranas.